El Ministerio de Fomento no va a poner problemas para que el puente de la Constitución de 1812 se abra al peatón durante varios días antes de su apertura al tráfico, cuando hayan concluido las obras. La ministra de Fomento, Ana Pastor, calificó de "estupenda" la idea que en este sentido planteó hace unos días Teófila Martínez, dejando claro la ministra que esta propuesta era viable "por el puente es de los gaditanos".

Pastor mantuvo un encuentro, a última hora de la mañana de ayer, con la alcaldesa gaditana y otros dirigentes del PP gaditano en la Diputación Provincial, donde hizo de anfitrión su presidente José Loaiza. En la reunión, breve, se analizaron diversas inversiones de Fomento en la provincia que la ministra centralizó en el desarrollo de la Plataforma Logística del Sur de Europa.

En todo caso, Ana Pastor fue especialmente lacónica a la hora de explicar lo tratado en este encuentro y facilitar información sobre las inversiones de su departamento en Cádiz. "La única noticia es que todo va de forma adecuada. Todo sigue adelante". De la misma tónica fue su respuesta sobre las obras del segundo puente. "Todo va muy bien. Los caminos críticos están totalmente superados y en cuanto a su desarrollo, una foto (refiriéndose a la subida del tramo desmontable) dice más que mil palabras".

Al encuentro no acudió la alcaldesa de Puerto Real, Maribel Peinado, que se quejó por no ser invitada. La titular de Fomento afirmó que estaba "encantada de atenderla si ella me lo pide".

Tras la reunión en Diputación, Ana Pastor y Teófila Martínez visitaron las obras del puente, accediendo al mismo desde el lado de Cádiz, aprovechando que el tramo desmontable estaba casi instalado, pues la operación concluyó a media tarde. Allí, los técnicos de esta infraestructura actualizaron los trabajos que se estaban ejecutando y lo que aún queda por sacar adelante.

La instalación de los 150 metros de longitud de esta pieza, supone un paso esencial en la última fase de construcción de este proyecto. Por lo que se refiere al tramo atirantado apenas queda por instalar una dovela grande y dos pequeñas, entre ellas la clave (que apenas tiene 8 metros de ancho), en el tramo entre las dos grandes pilas. A partir de las pilas 11 (camino de la 9) y de la 14 (camino de la 15), apenas quedan unas ocho dovelas. Igualmente queda apenas unos metros en el tramo hormigonado, que recorre el suelo del Bajo de la Cabezuela.

Con todo ello, y salvo incidencias de última hora, los 3.092 metros de longitud del puente podrán estar terminados en la segunda quincena del próximo mes de abril. Tras ello, quedarán varias fases de trabajo: asfaltado de todo el paso, instalación de los servicios de luz, saneamiento, agua, equipos informático, así como la instalación de las pantallas de seguridad y la señalización. Como último paso se realizarán las pruebas de carga. A la vez, se concluirán los trabajos en la rotonda de acceso a Cádiz y en el nudo del Río San Pedro.

Los operarios de Dragados aprovecharon toda la madrugada del martes para seguir con el izado del tramo desmontable, gracias a lo cual en la mañana de ayer estaba prácticamente a la altura necesaria para encajarlo en las pilas.

En este proceso estuvieron trabajando a lo largo de la mañana ayudándose de una tercera grúa que era la que lo iba moviendo por un lado y por otro hasta tenerlo en su sitio.

Esta ha sido una de las operaciones más complejas que ha tenido la construcción del puente en sus más de siete años de construcción de un puente que va a ser el segundo con el gálibo más alto del mundo. Al igual que los días anteriores, numerosas personas siguieron las evoluciones de la obra desde el paseo de La Paz.