El Ministerio de Fomento puso en marcha un procedimiento administrativo por el que se instaba a Dragados a recuperar el ritmo de trabajo en el puente de la Constitución de 1812, tras la ralentización y paralización de algunos tramos entre los meses de agosto y septiembre pasado. La acción administrativa planteada por Fomento a finales de la pasada semana se planteó ante el avance en las negociaciones que las dos partes mantenían para llegar a un acuerdo, tras aducir Dragados que necesitaba más dinero para concluir unas obras debido a diversos añadidos que se habían incluido en el proyecto final. Aunque ni Fomento ni Dragados han querido aportar cifras, la disputa sería de varias decenas de millones de euros.

Tras el requerimiento de Fomento, Dragados comenzó ayer a activar algunos de los tramos que se encontraban parados, especialmente la zona que se ejecuta sobre suelo del Bajo de la Cabezuela. Se espera que en los próximos días vuelvan los trabajos en la rotonda de acceso a Cádiz, junto a El Corte Inglés, la única que sí ha sufrido una paralización total desde principios de agosto pasado. Por contra, la fase más complicada de la obra, la instalación de las dovelas en el tramo atirantado, ha seguido desarrollándose con absoluta normalidad hasta el punto que en estos dos meses se han situado media docena de piezas, permitiendo que las pilas 12 y 13 estén a punto de quedar unidas mediante el tablero.

La alcaldesa, Teófila Martínez, en declaraciones a este Diario, manifestó que esperaba que "por parte de Dragados sería bueno que no sólo se recuperada el ritmo anterior, sino que se intentará recuperar el tiempo que se ha perdido", asumiendo que el segundo puente va a ser "un revulsivo muy importante para la ciudad". Lamentó que "se haya perdido un tiempo tan necesario. Por parte de la constructora se ha hecho un flaco favor en una obra de esta envergadura, en una fase tan avanzada de su ejecución y con un proyecto de más de 450 millones de euros. Todo ello hubiera merecido que Dragados hubiera alcanzado un acuerdo con Fomento antes de tomar medidas de presión".

Pendiente de que el Ministerio aclare el coste que para las arcas públicas ha tenido esta acción de la constructora (se niega que la cantidad sea la correspondiente a la diferencia en el coste del puente según los presupuestos del Estado de 2015 y 2014, unos 30 millones de euros), también queda por aclarar cómo va a quedar el calendario de ejecución del proyecto.

Teniendo en cuenta lo avanzado hasta ahora y siempre que no se produzcan más retrasos, ya sea por acciones de la constructora como por las condiciones del tiempo, lo más seguro es que el puente de la Constitución de 1812 pueda estar en funcionamiento a lo largo del segundo semestre de 2015. Hace ya mucho tiempo que quedó claro que no iba a dar tiempo de cara a las elecciones municipales de mayo de 2015; ahora habrá que ver si está listo para los comicios generales previstos para noviembre de ese año.

Así, el tramo atirantado, entre los pilares 10 y 15, podría estar terminado a lo largo del próximo mes de diciembre; la rotonda de acceso a Cádiz estaría concluida entre febrero y marzo de 2015; también queda el tramo hormigonado en Puerto Real, que concluiría igualmente entre estas fechas. Hay que instalar el tramo desmontable, que se iba a instalar en septiembre y que ya está construido en suelo del Bajo de la Cabezuela. A partir de este momento, quedaría la fase de asfaltado, instalación de todos los servicios (señalización, iluminación, pantallas de seguridad...) y las pruebas de fuerza de toda la estructura, antes de que se proceda a la inauguración definitiva del segundo puente.

Martínez espera que en este tiempo que aún resta no se produzcan nuevas sorpresas por parte de la constructora.