La mejora de las grandes cifras macroeconómicas del país siguen sin notarse en muchos sectores productivos de nuestra sociedad. La crisis aun está presente en el día a día, como pasa en Cádiz con el sector inmobiliario, que no acaba de ver la luz tras un túnel demasiado largo que se ha llevado a delante a buena parte de este negocio.

Es cierto que la crisis ha provocado una importante reducción en los precios de los pisos. Aunque aún quedan, ya es difícil encontrarse con casas en venta cercanas al millón de euros y, sin embargo, sí existe una oferta cada vez más amplia de viviendas que no pasan de los 150.000 euros, algo inimaginable hace apenas unos años.

A pesar de ello, siguen siendo muchos los pisos que están sobrevalorados por sus propietarios hasta el punto que algunas de las inmobiliarias consultadas por este diario destacan que "el 70% de las viviendas que están en el mercado son invendibles", ya sea porque su precio aún está por encima de la realidad como por las dificultades que ponen determinadas entidades bancarias a la hora de conceder créditos, el otro gran problema del sector inmobiliario.

"Estos pisos están fuera de la lógica del mercado. Sus propietarios, a pesar de eso, prefieren no bajar los precios ya sea porque no lo necesitan o, por el contrario, porque es la cantidad que deben al banco y no pueden rebajarla", se destaca desde la Inmobiliaria Hispania, una de las principales empresas del sector en la Bahía.

Esta firma reconoce que en lo que va de año "hay algo más de actividad", aunque el precio medio de las ventas es de 150.000 euros, e incluso los más elevados que pueden alcanzar los 350.000 euros.

Por contra, desde Prodyser el análisis por lo que respecta a las ventas en lo que va de 2013 son sustancialmente más negativas. Desde la central de Cádiz, José Linares evidencia el efecto negativo que en este sector está teniendo la puesta en el mercado de pisos propiedad de entidades bancarias. "Aunque en la ciudad no afecta tanto, pues son viviendas que proceden de grandes promociones (que se dan en ciudades con suelo para ello), sí existe una política bancaria en el conjunto del país para controlar la concesión de préstamos hipotecarios, que ahora sólo se dan si tienen un nivel de riesgo mínimo y a eso puede llegar muy poca gente".

Esta situación está incidiendo en las ventas que se mantienen como el pasado año.

En cuanto a los precios, también reconoce que se ha producido una sustancial rebaja en los mismos pero siguen siendo más elevados que en otras ciudades, donde la falta de suelo no es tan evidente como en Cádiz. Hoy, destaca Linares, "los pisos normales en Cádiz pueden estar entre los 200.000 y 300.000 euros".

Coincide con otras inmobiliarias en que muchos pisos se están poniendo a la venta como forma de "supervivencia" de sus propietarios, que no tienen capacidad para seguir pagando la hipoteca o, simplemente, no puede hacer frente a los gastos de una vivienda, "por lo que acaban marchándose a casa de sus padres y poniendo su casa a la venta, un ejemplo más de la situación social que estamos viviendo".