La función de un casco es proteger la cabeza de quien lo usa de golpes o peligros, y los progenitores de los alumnos del colegio Carlos III consideran que sus hijos están expuestos al peligro en el interior del propio equipamiento educativo, que adolece de graves problemas estructurales. Es por ello que ayer, en señal de protesta tanto por el mal estado del edificio como por la inoperancia de las administraciones, los escolares acudieron al centro con un casco cubriendo sus cabezas. Esta medida se repetirá todas las mañanas hasta el próximo día 21, cuando concluirá el presente curso escolar 2012/13.

Cabe recordar que el pasado 25 de abril se cayó una bovedilla (bloque que se encuentra entre viga y viga) del techo de una de las aulas. En concreto, de la clase de tercero de Primaria A. Y tras acudir a la escuela los técnicos municipales de Urbanismo y el delegado municipal de Educación, Pablo Chaves, el Ayuntamiento gaditano se comprometió a realizar las catas en toda la segunda planta del colegio público. Pero dos meses después, la comunidad educativa del centro sigue a la espera de que se desarrollen esos trabajos. "Se realizaron las catas en el aula afectada, pero reclamamos que se revise todo el techo de la segunda planta, porque el centro adolece de graves problemas estructurales y en los últimos años se han caído varios techos, sin contar con las goteras de todos los años. Nos tememos que el curso va a concluir y que el próximo año todo va a seguir igual, que no se va a hacer nada en los meses de verano, y hay que recordar a las administraciones que en este edificio pasan muchas horas centenares de menores, y nos preocupa su seguridad", manifestó ayer la presidenta de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos (AMPA) del Carlos III, Raquel Álvarez Pérez.

El pasado lunes, los miembros del Consejo Escolar del Carlos III fueron informados de que el Ayuntamiento envió al centro a tres empresas para presupuestar el coste de la obra en el techo de la segunda planta, "pero nos tememos que la intención del Consistorio no sea arreglar el techo, sino sólo presupuestar la actuación para decirle a la Junta de Andalucía que se trata de una obra mayor y, por tanto, pasarle la pelota. Y ya sabemos que la Administración andaluza dirá que si los techos están tan mal es porque el Ayuntamiento no ha realizado labores de mantenimiento". "El problema persistirá y los niños seguirán corriendo peligro". Y es que, como recordó Álvarez Pérez, los niños juegan todos los días durante el recreo en la tercera planta, sobre el techo afectado del segundo piso.

"Queremos el compromiso de que las obras se van a iniciar durante los meses de verano, y no descartamos realizar nuevas acciones de protesta la próxima semana, además de mantener hasta final de curso esta del casco", expuso la presidenta de la AMPA. Asimismo, Carmen Ramos Santana, madre de una alumna de quinto curso y miembro del Consejo Escolar, reclama también a la Junta de Andalucía la inclusión en el Plan OLA de las obras de remodelación que precisa este centro. Ramos Santana recordó que el Carlos III fue incluido en el año 2007 en el Plan Mejor Escuela (programa de modernización de infraestructuras educativas de la Consejería de Educación que fue sustituido por el Plan OLA) y que nunca se realizaron las obras prometidas. La representante del Consejo Escolar resalta la necesidad de una "intervención de urgencia" en las instalaciones educativas del Carlos III.

Hace unos años se desprendió el techo del vestuario de este colegio. En 2007, la AMPA denunció que la montera tenía goteras, así como el desplome de parte de la cornisa de la fachada lateral. En 2009 se desprendió el techo de un aula, y lo mismo ocurrió en 2012 y el pasado mes de abril.

Este colegio público de Educación Infantil y Primaria acaba de celebrar sus 25 años de existencia.