Vuelta a empezar. Apenas dos días después de que se retirara la bandera roja de las playas de la capital, una vez que había remitido la llegada a la orilla de ejemplares de la carabela portuguesa, el Ayuntamiento vuelve a cerrar las playas al baño porque esta medusa tóxica ha visitado de nuevo las costas gaditanas.

Así, el comité técnico de playas del Ayuntamiento de Cádiz volvió a reunirse ayer ante la aparición de nuevos ejemplares de esta medusa tóxica, conocida como carabela portuguesa, en distintos puntos de las playas gaditanas.

La vuelta de esta medusa a las playas de la ciudad ha llevado a dicho órgano a cerrarlas al baño como medida de precaución. La bandera roja ondea desde ayer en La Caleta, Santa María del Mar, la Victoria y Cortadura, y el Ayuntamiento volverá a poner en marcha el dispositivo de seguridad que estuvo vigente durante la semana pasada.

El mantenimiento del cierre al baño y la recomendación de no tocar las medusas se mantendrá hasta que la situación no vuelva de nuevo a la normalidad. La megafonía de la playa alertará de la prohibición del baño y de la recomendación de no tocar las medusas por su riesgo.

Cádiz fue la primera población de la costa andaluza en detectar hace un par de semanas la llegada de la presencia de la carabela portuguesa en las costas y su 'desembarco' en las playas, y por tanto la primera en prohibir el baño y solicitar precaución a los ciudadanos que anduvieran por la orilla. La medusas se fueron retirando de la arena durante esos días, hasta que dejaron de llegar. El Ayuntamiento, entonces, volvió a permitir el baño en las playas, pero izó la bandera amarilla para que se hiciera con precaución.