Contaba la ciudad con dos testigos de excepción en la plaza de San Pedro Vaticano. Con dos sacerdotes a los que los acontecimientos de la Iglesia en las últimas semanas los ha sorprendido cursando estudios en la capital italiana y que han vivido en primera persona todo lo ocurrido. Marco Antonio Huelga de la Luz y Antonio Montero no se perdieron, como no podía ser de otra forma, el momento histórico del pasado miércoles. Un momento que ambos confiesan que lo vivieron con lágrimas en los ojos.

"Cuando uno tiene que estar más entero que nunca porque va a recibir una gran noticia sobreviene una emoción tan grande que te emblandece a tal punto de llorar de alegría. Esa fue mi experiencia en San Pedro", reconoce Huelga, que se muestra sorprendido con la "euforia y la emoción que se desató" en esta plaza. "No tengo palabras para describir el momento de novedad y de esperanza que comenzó a vivirse cuando el Papa Francisco comenzó a hablar. Fueron momentos de mucha emoción", añade.

Por su parte, Antonio Montero cuenta que estaba sosteniendo la cámara de vídeo para grabar la aparición del nuevo Papa, pero al "sentirlo tan cerca consiguió que no pudiera soportar con firmeza la videocámara que llevaba en ese momento". Antes, ya había vivido un momento especial cuando la fumata blanca hizo desaparecer la lluvia "y un colega del gremio audiovisual -Montero estudia Periodismo- comenzó a llorar de alegría mientras tomaba posición con su cámara".

Después de vivir y todavía recordar con emoción todos esos momentos en la plaza de San Pedro, ambos sacerdotes gaditanos se muestran esperanzados con la elección del Pontífice. "Me encanta que el Espíritu Santo tire por tierra todas las quinielas que se han creado artificialmente. Esto demuestra que un cónclave no son unas elecciones generales ni tiene que ver con pugnas políticas", indicaba Montero, añadiendo Huelga que se trata de una "elección inédita, una respuesta alta que hace pensar que las voces de una crisis en el Vaticano y en la Iglesia no tienen mucho sentido".