Abrir un edificio para utilizar un solo despacho supone, en muchos casos, consumir la energía que necesitaría el inmueble si estuviese ocupado en, al menos, un 30%. Éste es uno de los datos recogidos en el borrador sobre Medidas de Responsabilidad en el Gasto de la Universidad de Cádiz que ha elaborado el equipo de gobierno de la institución académica. Un documento de diez folios que ya ha sido abordado en el Consejo de Gobierno y que da sustento a diversas medidas: unas ya desarrolladas, otras que se proponen para su aprobación y otras que deben ser objeto de un profundo análisis con el fin de "abordarlas y desarrollarlas con reflexión y sensatez", como la ya anunciada en este periódico de cerrar todos los centros universitarios durante el mes de agosto.

Dicha medida se engloba dentro del primero de los seis ejes de actuación propuestos por los máximos responsables de la Universidad gaditana. Eje 1. Reducción de gastos de funcionamiento de los inmuebles administrativos. Eje 2. Medidas relativas a la gestión de recursos humanos. Eje 3. Medidas de eficiencia organizativa. Eje 4. Medidas relacionadas con los métodos de trabajo y uso racional de los servicios de telecomunicaciones. Eje 5. Medidas sobre indemnizaciones por razón del servicio, atenciones protocolarias y representativas y relacionadas con eventos y actos institucionales. Y eje 6. Participación de la comunidad universitaria. Seguimiento y evaluación.

Ejes de actuación "abiertos, susceptibles de modificación, de incorporación y mejora en función de las sugerencias de la comunidad universitaria en general y de los órganos de gobierno en particular", según reza en el dossier.

La iniciativa de clausurar la práctica totalidad de los centros desde el 1 al 31 de agosto afectaría a todos los servicios complementarios que se prestan en los mismos, como limpieza, mantenimiento, etc., y sólo se mantendrían aquellos servicios que se determinen necesarios, como los laboratorios de investigación con animales. Los servicios que deban seguir activos se trasladarían durante ese período de cierre al Aulario Simón Bolívar, "donde se habilitarían los puestos de trabajo necesarios para el mantenimiento de la actividad". Asimismo, en este mismo equipamiento se abrirá la "única" sala de estudios del campus de Cádiz, y será a partir del 16 de agosto. En los campus de Jerez y Algeciras, todas las instalaciones permanecerán también cerradas, y el servicio de sala de estudio se prestará en dependencias de las escuelas adscritas en el mismo período.

Con esta medida se ha estimado un ahorro superior a los 300.000 euros, ya que supondría un ahorro de mantenimiento y consumo a lo largo de todo el mes (limpieza, electricidad, agua, telefonía y otros costes directos), así como una menor necesidad de personal eventual, "ya que no serían necesarias las contrataciones temporales para este periodo".

Esta medida ha sido bien acogida en el Consejo de Gobierno, aunque aún no ha sido aprobada de forma definitiva. Los centros, como publicó este medio la pasada semana, están elaborando un informe sobre su viabilidad, ya que no todos pueden echar la llave durante los 31 días de agosto, al albergar algunos laboratorios de investigación con animales, como se ha señalado.

A esta medida se suman otras tres, encaminadas a ahorrar en el consumo de energía eléctrica, de agua y en la climatización. El consumo de energía eléctrica supone a la UCA un gran desembolso económico. En el presupuesto de 2012 se estima la cantidad de 2.070.000 euros. Las empresas concesionarias de las cafeterías y copisterías no pagan energía, por lo que la Universidad gaditana ya ha puesto en marcha la implantación de un sistema de monitorización mediante programa Scada de control-facturación de los consumos a dichas empresas concesionarias de cafeterías y copisterías. Asimismo, con el objetivo de reducir la factura eléctrica, se menciona en el documento la firma de un convenio con REDEJA "para la contratación a nivel regional de todas las instalaciones de los organismos de la Junta de Andalucía que se adhiriesen al mismo", y se informa de que REDEJA ha conseguido precios para este año que llegan, en algunos casos, a un 20% por debajo de las tarifas que actualmente se aplican a la Universidad.

Además, como acciones complementaria, se enumeran algunas de las siguientes: mantener los equipos apagados siempre que sea posible; revisar las luces encendidas en dependencias sin actividad; no utilizar estufas y calefactores adicionales a la calefacción central; aprovechar la luz natural; sustituir "en futuras reformas o cuando sea necesaria su reposición" los sistemas de iluminación existentes por sistemas de iluminación eficientes, como lámparas de bajo consumo, sensores de presencia o de apagado automático.

Con respecto al consumo del agua, en 2012 se ha iniciado la implantación de contadores de agua individualizados por edificios y puntos de gran consumo - como son las cafeterías- con lectura remota vía web. Asimismo, la UCA pretende ir reduciendo paulatinamente las superficies de césped en los jardines para conseguir sistemas de riego por goteo con el mínimo consumo.

Y en cuanto a la climatización, tras resaltarse que supone el "mayor consumo eléctrico" de las instalaciones universitarias, se indica que subir o bajar un grado puede suponer un 7% del consumo de los equipos. Como medidas de ahorro, las siguientes: la implantación de un sistema de monitorización mediante programa Scada con capacidad para monotorizar los periodos de funcionamiento y temperatura de los equipos; instalación de relojes-programadores en aquellas instalaciones de climatización que, no siendo motorizables, puedan centralizarse eléctricamente; la sustitución progresiva de los equipos obsoletos por otros de mayor eficiencia y consumo; campañas de concienciación; y utilizar preferentemente, siempre que sea posible, la ventilación natural.

El eje 2, de Medidas relativas a la gestión de recursos humanos, sólo recoge la propuesta de concentración del disfrute de las vacaciones de verano en el mes de agosto "de todo el personal docente e investigador y de administración y servicios de la Universidad".

El 3, de Medidas de eficiencia organizativa, plantea la realización, en este año, de estudios técnicos tendentes a centralizar los suministros o servicios que se contraten de forma general. Ello podría afectar a suministros y servicios tan variados como la compra de papel o la contratación centralizada de adquisición de reactivos. También se habla de limitar los encargos de estudios y trabajos técnicos a los "estrictamente necesarios" para "la consecución de los objetivos estratégicos de la UCA". En el apartado de servicios de mantenimiento, se procurará llevar a cabo estas labores con personal propio "en la medida de sus disponibilidades"; y en caso de que sea insuficiente, se procederá a la contratación administrativa "buscando la mejor eficiencia en el gasto". También se quiere potenciar el uso de las herramientas de comunicaciones internas electrónicas para ahorrar así en papel y en impresión. Y siempre que sea posible se utilizará la videoconferencia como instrumento de comunicación.

El eje de actuación 4, sobre Medidas relacionadas con los métodos de trabajo y uso racional de los servicios de telecomunicaciones, aborda la reducción del gasto de telefonía y la racionalización en la compra y soporte de ordenadores. Con respecto a lo primero, se han iniciado ya negociaciones con las actuales empresas adjudicatarias "para una mejor optimización del servicio que prestan y las tarifas en vigor"; y se realizará una "mejor definición de las causas y necesidades que puedan dar lugar al uso de un móvil corporativo". Sobre el segundo aspecto, se aporta el dato de que se están realizando dos estudios: uno, por parte de la Dirección General de Infraestructuras y Tecnologías de la Información, de las necesidades reales por puesto de trabajo, creando el puesto tipo (hardware y software); y otro de reducción de gastos de soporte al puesto de trabajo. En este punto, se explica que actualmente se da servicio a una media de 2,5 ordenadores por PDI/PAS de la UCA. Con la información adecuada, se propone que el usuario defina qué ordenador va a ser mantenido/soportado de los ordenadores que pueda tener inventariados. Al resto de computadoras que el usuario desee tener, se le dará un punto de conexión a red y acceso al software corporativo para mantenimiento por parte del propio usuario.

El quinto eje aglutina una medida sobre indemnizaciones por razón del servicio, y consiste en la modificación de la normativa de indemnizaciones por razón del servicio, aunque no se concreta nada al respecto. Sí se destaca que mientras se lleva a cabo dicho cambio, "se enviarán instrucciones a los responsables de las orgánicas y de las Cajas Habilitadas en orden a la estricta aplicación de la normativa".

Y por último, el eje 6, el relativo a la participación de la comunidad universitaria en el desarrollo, aplicación y evolución de las presentes medidas de responsabilidad en el gasto. La institución académica gaditana tiene previsto establecer mecanismos de participación para facilitar la incorporación de sugerencia e iniciativas de los miembros de la UCA "en el desarrollo, aplicación y evolución de las presentes medidas de responsabilidad en el gasto". Igualmente, está previsto desarrollar campañas internas de concienciación e informativas sobre estas medidas, "transmitiendo los resultados positivos como estímulo y los negativos como desafío para mejorar".

Será el Vicerrectorado de Prospectiva, Calidad y Comunicación el que procederá a realizar el seguimiento y evaluación de todas las medidas que se vayan ejecutando.

"Estamos convencidos de que el buen funcionamiento de nuestra universidad y su capacidad de respuesta a los nuevos retos dependen de la implicación de toda la comunidad universitaria en un proyecto compartido", se lee en el documento del equipo rectoral.