Rigidez en la rodilla, sensación de bloqueo, inflamación alrededor de la articulación o chasquido o crujido al mover la rodilla como el que sintió el portero del Real Madrid, Thibaut Courtois, en uno de los últimos entrenamientos. Son entre otros, los síntomas de la rotura de menisco.

Es una lesión común que ocurre cuando el cartílago en forma de media luna ubicado en la articulación de la rodilla se daña o se rompe. Esta lesión puede ocurrir debido a un movimiento brusco, un giro repentino, una fuerza excesiva o un impacto directo en la rodilla.

La rotura de menisco puede causar dolor, inflamación, rigidez, sensación de trabazón en la rodilla e incluso dificultad para mover la articulación. Dependiendo de la gravedad de la rotura y de su ubicación, el tratamiento puede variar desde reposo y fisioterapia hasta cirugía para reparar el menisco dañado. 

El menisco es una estructura cartilaginosa que se encuentra en la articulación de la rodilla. Hay dos meniscos en cada rodilla, uno en el lado interno (medial) que es el que ha perjudicado a Courtois y otro en el lado externo (lateral). Su función principal es actuar como amortiguadores y estabilizadores de la articulación de la rodilla con los que ayudan a distribuir el peso del cuerpo de manera uniforme sobre la superficie articular y a reducir los impactos durante el movimiento. Además, contribuyen a la lubricación de la articulación y a mejorar la congruencia entre el fémur y la tibia.

Tiempo y proceso de recuperación

El tiempo de recuperación variará en función de la gravedad y del tipo de intervención que se haya realizado. La estimación ronda desde las pocas semanas hasta los 3 o 4 meses de recuperación absoluta para volver a la práctica deportiva. Veamos las diferentes fases por las que puede pasar un paciente de rotura de menisco:

1. Diagnóstico preciso: El primer paso es obtener un diagnóstico preciso mediante pruebas de imagen, como resonancia magnética o ecografía, para determinar la ubicación y gravedad de la rotura de menisco.

2. Tratamiento inicial: Dependiendo de la gravedad de la lesión, el tratamiento inicial puede incluir reposo, aplicación de hielo, compresión y elevación para reducir la inflamación y el dolor.

3. Fisioterapia: Una vez que la inflamación y el dolor hayan disminuido, es probable que se recomiende comenzar un programa de fisioterapia. Esto puede incluir ejercicios de fortalecimiento, estiramientos y técnicas de rehabilitación específicas para mejorar la movilidad y la estabilidad de la rodilla.

4. Consideración de la cirugía: En algunos casos, especialmente si la rotura de menisco es grande o si los síntomas persisten después de un período de tratamiento que no ha hecho efecto, puede ser necesaria la cirugía. En el caso de Courtois, ya ha sido operado de la rotura de menisco de la parte interna de la rodilla derecha cuya intervención ha salido bien y se encuentra bajo la supervisión de los servicios médicos del Real Madrid. 

5. Rehabilitación postoperatoria: Después de la cirugía, se requerirá un período de rehabilitación para permitir que la rodilla se cure adecuadamente. Esto puede incluir ejercicios de fortalecimiento progresivos, movilización de la articulación, trabajo de equilibrio y coordinación, así como el seguimiento de las indicaciones del cirujano y el fisioterapeuta.

6. Regreso gradual a las actividades: Una vez completada la rehabilitación, se puede comenzar un programa de retorno gradual a las actividades normales y deportivas. Es importante seguir las recomendaciones del equipo médico y evitar sobrecargar la rodilla demasiado pronto para prevenir la recurrencia de la lesión.