El día de ayer quedará marcado en rojo en la memoria histórica de la empresa Pascual. Tanto la Dirección de la firma como sus propios trabajadores siempre llevaron a gala que, con más o menos tensión, con más o menos disputas, "nunca nos ha faltado una nómina", según relataba estos días el responsable sindical de los trabajadores de los seis hospitales que Pascual mantiene en Andalucía, José María Manzano.

Por ese motivo, cuando a media mañana de ayer recibían una notificación por parte de la empresa que indicaba que este mes "no tiene liquidez para hacer frente a las nóminas", se registró un cambio de posturas.

Manzano dijo a este periódico que la empresa "no es que no quiera pagar, es que ya carece de dinero para hacerlo" por el conflicto por el concierto sanitario con la Junta de Andalucía.

Apuntó que "en el caso de que la Consejería de Salud no abone los 13 meses que tiene pendiente de asistencia será imposible que se puedan pagar las nóminas".

Por ello, Manzano ha abogado porque "ahora más que nunca" las reivindicaciones de los trabajadores de Pascual sean "más fuertes" y reine la unidad en la plantilla y ha añadido que "no van a poder con nosotros".

El consejero de Presidencia de la Junta, Manuel Jiménez Barrios, dejó caer este miércoles que Pascual tiene sobre la mesa un concierto con unas cifras mejores que las firmadas durante el último concierto de aplicación para sus seis hospitales y para una vigencia de cuatro años. A este respecto, Manzano negó de manera rotunda "la bondad de esas cifras". "El dinero consignado para este concierto es el que es, el aprobado en Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía el pasado 26 de enero, ni más ni menos". "Ya no es una cuestión económica y es incierto que la última propuesta de la Junta mejore las anteriores. Mienten una vez más", según Manzano.

Y ayer, por otra parte, fue una nueva jornada de cruce de sentencias judiciales en una y otra dirección, entre la Junta de Andalucía y Pascual. En esta ocasión, desde la Dirección de José Manuel Pascual Pascual se recordaba que la Administración andaluz acumula nueve sentencias en su contra en todo este conflicto.

A pesar de ello, en referencia a la sentencia que ayer publicaba Diario de Cádiz, "que tanto parece enorgullecer a D. José Manuel Aranda", director gerente del SAS, la "victoria judicial no se produjo porque el ponente pensara que el SAS tenía razón", sino por meras cuestiones formales en las que Pascual considera determinante la "ocultación de información" por parte del letrado que representaba al Servicio Andaluz de Salud.

Sobre la situación actual del conflicto, la Dirección de Clínicas Pascual afirma en un comunicado que "la postura actual de la empresa es no aceptar un concierto que no recoja la actividad real que se hace en los centros". Así, el propietario de la Clínica San Rafael de Cádiz quiere dejar claro que "no se trata de una cuestión económica" ya que el presupuesto con el que cuenta el SAS para este concierto es el aprobado por el Consejo de Gobierno de la Junta en enero pasado, "y lo aceptamos".

En su comunicado, la Dirección de José Manuel Pascual Pascual, S.A. afirma que el SAS "usa la legalidad como escudo", y ,"de la misma forma que dice tener la mano tendida hacia la empresa para llegar a un acuerdo, utiliza toda la artillería de que dispone para coaccionarla".

En relación con la imposibilidad de abonar la nómina de noviembre, la Dirección de Pascual afirma que "se nos deben pagos de los conciertos anteriores y del período de las falsas prórrogas, y continuamos sin recibir ningún pago en relación con los servicios prestados desde el mes de noviembre del año pasado".