La línea férrea entre Cádiz y Sevilla permanece cortada desde esta tarde como consecuencia de la rotura del cable de las catenarias, por causas no determinadas, a la altura del municipio sevillano de Las Cabezas de San Juan, lo que mantiene a un tren parado en la zona y ha afectado hasta ahora a otros ocho.

Un portavoz del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ha informado a Efe de que esta incidencia, en la que trabajan ya los técnicos de esta empresa pública para resolverla, ha ocurrido a las 19.00 horas, muy cerca de la estación de Las Cabezas, al producirse «un enganchón de catenarias» con un tren de media distancia que iba de Sevilla a Cádiz.

Como consecuencia de ello, según el portavoz de Adif, dependiente de Fomento, se mantiene cortado el servicio ferroviario y se han visto afectados ocho trenes: 6 de media distancia entre Cádiz y Sevilla y viceversa y 2 de largo recorrido hasta Madrid o viceversa.

Ha precisado que la compañía Renfe ya está haciendo transbordos por carretera para trasladar a los viajeros, aunque por el momento no ha trascendido el número de viajeros ya afectados o a los que podría afectar dicha avería en las próximas horas.

El portavoz de Adif ha indicado que como esta línea es de vía única a la altura de Las Cabezas, hasta que no quede expedita, se retire el tren y se corte la tensión eléctrica, no podrán trabajar para restablecer la electrificación, lo que ha calculado que llevará «unas cuatro horas o cuatro horas y media», con lo que se prevé que el servicio quede restablecido «bien entrada la madrugada».

También ha añadido que, cuando se retire el tren y mientras los técnicos de Adif empiezan a reparar la avería, Renfe tiene previsto utilizar trenes diesel para pasar por esa zona y llevar a viajeros tanto en dirección Sevilla como en sentido Cádiz, como complemento de los transbordos que ya está haciendo por carretera.

Sobre el problema ocurrido, ha explicado que el hilo de la catenaria sustenta la electricidad de la que se alimenta el tren y resbala por el pantógrafo (brazo articulado) que tiene en su parte superior la locomotora, por lo que si éste tiene algún problema o el hilo «se engancha, entonces el cable se parte» y la línea queda fuera de servicio.