"Drástico, riguroso, estricto y necesario". Es la definición que la propia María José García-Pelayo hizo ayer de su Plan de Ajuste para el Ayuntamiento de Jerez, aprobado a primera hora en la reunión de los viernes de la junta de gobierno local y que llevará al próximo pleno municipal del 27 de septiembre para que sea debatido con los diferentes grupos políticos. Sus 37 recetas "urgentes" y "extraordinarias" para garantizar el equilibrio presupuestario y los pagos esenciales -nómina, concesionarias, proveedores y bancos- prevén ahorrar un total de 25 millones de euros en el próximo Presupuesto municipal de 2012. De esa cantidad, 11,5 millones saldrán de un modo u otro del bolsillo de los trabajadores municipales, mientras que el resto hasta alcanzar los más de 4.000 millones de la antiguas pesetas derivará de otras decisiones ligadas a la rebaja en el gasto corriente y otro tipo de decisiones de racionalización administrativa. Además, el Plan se complementa con actuaciones para la mejora de los ingresos y la optimización de los recursos propios. El objetivo último es conseguir el "déficit cero" entre los ejercicios 2012 y 2013, según enfatizó la dirigente popular durante su comparecencia en el Consistorio. Una alcaldesa que ha emprendido la línea de recortes férreos y severos que viene marcando la dirección de su partido desde Madrid y que ya ha convulsionado gobiernos autonómicos como el de Castilla-La Mancha.

Bajo la premisa de que el PP no ha sido elegido en las urnas "para cruzarse de brazos, quejarse, ni para mirar atrás", como señaló públicamente la alcaldesa, las 32 páginas del primer Plan de Ajuste, que ya conocen los grupos de la oposición y que 'cuelga' desde ayer de la web municipal, incluyen medidas agresivas adelantadas por este medio en su edición de ayer, como los recortes de hasta un 31% en las productividades y gratificaciones de los 373 empleados que ganen más de 40.000 euros al año, así como la solicitud del concurso de acreedores seguido de un ERE extintivo en Onda Jerez. No obstante, también se estima la adopción de decisiones que encierran no menos coste político en los próximos meses y no menos controversia ante su "urgente" puesta en marcha. Aun así, Pelayo dejó claro que "no renunciamos a que en el futuro haya nuevas medidas, pero éstas son irrenunciables".

En este grupo se encuentran el cambio en el modelo de gestión en Aguas de Jerez (Ajemsa), que pasará en un plazo de medio año a manos de una empresa privada bajo concesión administrativa, así como la explotación privada de los Montes de Propios, para potenciar, dijo la primera edil, los ingresos cinegéticos, turísticos y agrícolas. En ambos casos, descartó hablar de privatización, pues el Ayuntamiento "en ningún caso venderá estas sociedades". Al tiempo, otras empresas municipales vacías de contenido directamente se liquidarán, como Comujesa (previamente cederá las acciones del Xerez), Jerez XXI Speed Festival y Geldemsa (Gerencia Local de Desarrollo Económico). Con esta decisión, matizó, se producirá una reducción del gasto de unos 500.000 euros.

Mientras habló de partidas "intocables" ligadas al gasto social y a la creación de empleo, Pelayo también se comprometió a mantener la "congelación" de impuestos y tasas en la elaboración de las ordenanzas fiscales para el año próximo.

Después de presentar nada más aterrizar en la Alcaldía unas cuentas públicas que indican que la deuda municipal asciende a casi 1.000 millones de euros y adjudicar, ayer mismo, a una empresa externa una auditoría-consultoría, la alcaldesa ya ha presentado una batería de medidas que son, dijo, "el camino para salir de la espiral en la que se encuentra el Ayuntamiento, una situación que lastra a Jerez pero que tiene solución". "Tenemos un compromiso político y la obligación moral de poner orden en las cuentas públicas; este Plan no tiene marcha atrás pero estamos abiertos a todas las aportaciones", apostilló con determinación.

En dos de los asuntos más espinosos del Plan de Ajuste, el recorte de las productividades y la negociación a la baja de un nuevo convenio colectivo del Ayuntamiento, Pelayo mostró igual contundencia que al pronunciarse sobre el ERE que lleva "implícita" la solicitud del concurso de acreedores para Onda Jerez. "Vamos a intentar minimizarlo pero es inevitable", se refirió la alcaldesa a propósito de lo anterior. En el caso de la rebaja salarial, y aparte de señalar que extenderá el decreto de Zapatero del pasado año (mediante el que se reducían los sueldos públicos en un 5%) al 'holding' de empresas, la máxima responsable municipal adelantó que "comenzaremos a negociar un convenio colectivo en el Ayuntamiento ajustado a la situación económica". En este sentido, manifestó que denunciará el acuerdo vigente antes del próximo 31 de octubre y que planteará a los representantes de los trabajadores el objetivo de una rebaja de 10 millones de euros en los gastos de personal para 2012.

"La reducción se hará con o sin acuerdo pero esperamos que los sindicatos sean quienes decidan por dónde recortamos", especificó. A estos 10 millones de ahorro se sumará la rebaja de 1,5 millones prevista gracias al recorte de los complementos de productividad y gratificaciones a quienes ganen más de 40.000 euros anuales. "Un punto de partida justo y equitativo", como lo consideró Pelayo, que comenzará a aplicarse desde el próximo noviembre. Esta medida afectará a 373 trabajadores municipales y el recorte, sólo en los conceptos susceptibles de ser 'tocados' -para lo que ya hay un informe jurídico-, se moverá entre un 1,5% para quienes ganen de 40 a 45.000 euros y un 31,5% para los empleados que perciban desde 140.000 euros. A todo esto, la alcaldesa dijo que hay unos 40 empleados sin estos pluses pero que sí ganan más de 40.000 euros, por lo que "habrá que hablar y trabajar con ellos para que la rebaja se produzca".