Fernando Álvarez, nadador del Club Natación Cádiz, adoptó ayer una postura ejemplar en el transcurso de una prueba en el Mundial Máster de natación que se está celebrando en Budapest. Antes de la salida de los 200 metros braza, se solicitó que se guardara un minuto de silencio en memoria de las víctimas de los atentados acaecidos en Barcelona.

Ante la negativa general y aceptada por parte de la organización con respuestas como "no se puede perder un minuto", Álvarez decidió no lanzarse al agua a la par que sus competidores y permaneció de pie en la plataforma de salto durante 60 segundos, dejando en un segundo plano el objetivo competitivo que le había llevado hasta Hungría. El Club Natación Cádiz ha aprovechado este desagradable hecho para reiterar su muestra de pesar ante la barbarie del atentado.