No es nada fácil encontrar un delantero bueno, bonito y barato. Más bien es imposible. El gol se paga a precio de oro y no sólo en Primera División. En Segunda A, también. El Cádiz bucea en el mercado en busca de un ariete de referencia, como lo fue Alfredo Ortuño con sus 17 tantos pese al bajón que sufrió en la recta final de la temporada que llega a su fin. La dilatada experiencia de Quique Pina y Juan Carlos Cordero en el mundo del fútbol hacen pensar que manejan varias posibilidades. El verano acaba de empezar, ni siquiera ha irrumpido en el calendario el mes de julio y hay tiempo de sobra para encontrar el hombre que abandere la faceta goleadora.

Lo que sí queda claro es que la caza del delantero no es nada sencilla en una categoría de plata cada vez más igualada. Joselu, máximo anotador de LaLiga 1|2|3 con 23 dianas, había quedado desvinculado del Lugo y ya ha firmado por el Granada, club recién descendido que le ha puesto un jugoso contrato sobre la mesa. Ángel es otro de los artilleros que están libres y es una de las joyas del mercado. En las filas del Zaragoza fue el tercer goleador de Segunda A con 21 tantos -uno menos que Roger, del Levante- y está en la agenda de la dirección deportiva del Cádiz. El club quiere contar con sus servicios y es uno de los primeros de la lista, si no el primero. No hay que pagar traspaso. El entrenador, Álvaro Cervera, no ha ocultado que es un futbolista que le encanta. Rápido, con experiencia -30 años- con movilidad en la zona de ataque, trabajador y con puntería de cara a puerta.

Ángel encaja en el perfil que quiere la entidad cadista pero la misión no es nada fácil porque tiene varios pretendientes, entre ellos Osasuna y Tenerife, además de ofertas procedentes del extranjero. El jugador deshija la margarita mientras disfruta de sus vacaciones.

Hace una semana se daba casi por hecho su contratación por el conjunto navarro pero lo cierto es que no ha firmado y sigue libre a la espera de una decisión. El mayor competidor del Cádiz en la puja por el atacante quizás sea oueda ser el conjunto canario. De hecho, Ángel es natural de San Cristóbal de La Laguna (Tenerife) y se trata, por tanto, del equipo de su tierra, que le tira mucho, como demostró en la última jornada de Liga, cuando el cuadro chicharrero visitó La Romareda y el delantero manifestó que "firmo marcar dos goles y el Tenerife tres. Mis compañeros seguro que no porque quieren ganar, pero también firmaría un 5-6, así de claro lo digo". Sus manifestaciones levantaron tal revuelo en la capital aragonesa que el club maño paralizó de inmediato los contactos para su posible renovación.

Ángel es la prioridad pero si se escapa el Cádiz no pierde de vista el mercado nacional y el extranjero. En el caso de que no llegue el canario, el club podría pescar en otras ligas.

El delantero que queda fuera de órbita es Borja Iglesias, ariete del Celta de Vigo B que marcó el pasado curso 34 goles en Segunda División B y sobre el que el Barcelona ha echado sus redes. Los dos clubes negocian el traspado del jugador, que reforzaría al filial azulgrana, recién ascendido. Los contactos se han intensificado en las últimas horas y el Barcelona ha subido su oferta inicial, superior al millón de euros. El ariete no tiene sitio en el primer equipo del Celta, que no vería con malos ojos una operación que sería rentable en lo económico.