Oinatz Aulestia tardará mucho tiempo, o tal vez nunca, en olvidar el gol que le marcó el Cacereño desde más de 50 metros. Su autor, Plata, ha sido un mal sueño para el portero vasco, que revive lo que sucedió en aquel momento. "Es posible que haya sido el mejor gol que me han metido. Entró justo pegado al larguero y sin botar. Me fastidió un poco porque no es del todo culpa mía, pero hay que buscar el por qué", señaló ayer el meta cadista cuando pasó por la sala de prensa de El Rosal y se le preguntó por lo sucedido ante el conjunto extremeño.

Aulestia no huye de responsabilidades pero aclara que "la línea defensiva está adelantada y yo tengo que estar fuera", que es lo que sucedió cuando Plata soltó el patadón desde su propio campo.

Para referirse a los males del equipo, apela a "la falta de confianza y hay que creerse que somos buenos jugadores". "Cuando nos ponemos detrás en el marcador vamos a por todas al no tener nada que perder. Creo que debemos pensar que somos buenos jugadores y que tenemos que demostrarlo".

Sobre el ambiente tenso que se vivió el domingo pasado, indicó que "la situación es difícil porque no estamos dando buena imagen cuando se dijo que íbamos a ir sobrados". "Es normal que la afición esté dividida y que exija más. Por eso tenemos que ir todos a una y si la afición está con nosotros será más fácil superar las trabas".