Álvaro Cervera recurre a un auténtica revolución para tratar avanzar eliminatorias. El entrenador sorprendió en el primer partido del cruce contra el Racing de Ferrol con una alineación que pocos, por no decir nadie, hubiesen imaginado, tanto por nombres como por posiciones. Lleva un mes al frente de la plantilla y sabe cómo está cada jugador. Para eso trabaja a diario con ellos. Los cambios más llamativos figuran en los lados de la defensa. Xavi Carmona, que no había contado para el nuevo técnico hasta el último partido de Liga, la intrascendente visita al campo del real Jaén -el futbolista se estrenó en ese choque con el actual inquilino del banquillo- salió como titular en el lateral derecho ante el conjunto gallego en lugar de Juanjo, que había sido fijo en ese puesto en los partidos anteriores. El ex del Melilla es uno de los sacrificados en el arranque del play-off, pero no el único. El caso de Andrés Sánchez es todavía más notorio. Se quedó fuera de la primera convocatoria de 18 jugadores, en la que apareció ningún defensor zurdo. Pasó de ser el titular con asiduidad a no poder estrenarse por fin en una fase de ascenso con el Cádiz después de perderse las dos anteriores por lesión.

De hecho, Cervera apostó por Servando como lateral izquierdo por sus cualidades a la hora de defender pese a que quizás fue la primera vez que el isleño, central y diestro ocupó el puesto de lateral izquierdo.

El caso de Servando no deja de ser curioso. El zaguero ha jugado esta temporada en tres posiciones bien distintas. La mayoría de las veces que participó lo hizo en su posición natural en el centro de la defensa, aunque Claudio Barragán lo reubicó como mediocentro en el encuentro en casa contra el Granada B y ahora Cervera lo desplaza al costado izquierdo. El nuevo entrenador dijo el viernes que en la plantilla hay tres o cuatro jugadores de los que gusta tener a todo técnico por su capacidad de ir a muerte con las ideas del míster aunque no les llegue a gustar del todo. No dio nombres, pero tiene toda la pinta de que Servando es uno de ellos. Durante el choque contra el Racing de Ferrol se notó que no era su posición, aunque supo salir airoso.

El míster se decantó por un trivote en su idea de fortalecer la medular y cortocircuitar el juego del adversario. Se apoyó en la experiencia de David Sánchez, Sergio Mantecón y Abel Gómez, con este último algo más adelantado. Entre los tres suman 104 años (Mantecón cumplirá 36 en junio, Abel Gómez tiene 34, edad que alcanzará David Sánchez en julio) y ellos son los llamados a llevar el control de cada partido, con el auxilio del sub'23 Nana cuando el esfuerzo empieza a pasar factura.

La presencia de Salvi y Álvaro García en los extremos siguió los parámetros de la lógica. Dos jugadores veloces, verticales y solidarios a la hora de ayudar a los laterales en labores defensivas. La ausencia de Dani Güiza en la alineación fue una de las notas llamativas. El técnico apostó la juventud y el trabajo constante de Lolo Plá y dio entrada al jerezano en la última media hora. Sus compañeros buscaron al internacional con numerosos pases.