¿Qué tienen en común el Cádiz y el Real Madrid en los últimos tiempos? La falta de gol. Mientras uno de los trasatlánticos de la Primera División española y el fútbol mundial navega en un mar de dudas por la ausencia de puntería en una plantilla diseñada a golpe de talonario -no pudo pasar del empate a cero ante el recién ascendido Sporting de Gijón-, uno de los máximos favoritos, a priori, para lograr el ascenso a Segunda A no termina de ver puerta con claridad pese al teórico potencial que atesora en la complicada categoría de bronce.

El conjunto amarillo dejó su portería a cero en el reciente primer partido de Liga contra el Recreativo de Huelva, pero no fue capaz de marcar un único gol que le hubiera sido de gran utilidad para sumar los tres puntos en lugar del único que se llevó del estadio Nuevo Colombino.

Los hombres de Claudio Barragán no tuvieron problemas para batir a sus adversarios en los primeros ensayos veraniegos (1-5 al Barbate, 1-4 al Chiclana, 1-3 a la Roteña, 0-2 al Atlético Sanluqueño). Eran rivales de menos categoría, pero la sequía empezó a ser visible en el Trofeo de la Sal, cuando, ante equipos también por debajo de Segunda B, el Cádiz no pasó de anotar un solo tanto frente al modesto Xerez DFC (Segunda Andaluza) y no le hizo ninguno al San Fernando (Tercera División), ambos en encuentros de 45 minutos cada uno y aún sin la presencia de Dani Güiza y Wilson Cuero, los delanteros que están llamados a ser las referencias goleadoras esta temporada.

En el Trofeo Carranza, los gaditanos, aunque en general ofrecieron una buena imagen ante Atlético de Madrid y Granada (los dos de la Liga BBVA), sólo marcaron un gol en 180 minutos. Se quedó a cero ante la potente escuadra colchonera obtuvo una meritoria igualada antes de caer en la tanda de penaltis- y vio puerta una vez contra el cuadro nazarí. Cuero y Güiza ya habían aterrizado, aunque el jerezano sólo participó en la recta final del partido de consolación. Llegó la hora de la verdad con el comienzo de la Liga y en el duelo inaugural contra el Recreativo el acierto en los metros finales fue nulo.

El balance es de sólo dos goles marcados en los últimos 360 minutos, lo que supone una raquítica media de una diana cada 180. Ninguno de los tres delanteros (Lolo Plá, Cuero y Güiza) ha marcado un gol con la camiseta cadista en todo el verano y su aportación empieza a ser necesaria sin dilación una vez que ya está en marcha una competición oficial que este curso se presenta más exigente que nunca, tanto en el torneo de la regularidad como en la Copa del Rey (el Murcia espera la próxima semana en la Nueva Condomina en la primera eliminatoria a partido único).

En la entidad cadista no saltan las alarmas porque consideran que esto no ha hecho más que empezar y queda un mundo por recorrer, aunque el conjunto amarillo está obligado a afinar ya el punto de mira para sumar de tres en tres y situarse en la zona alta de la clasificación desde las primeras jornadas.

El Cádiz marcó en 32 de las 38 jornadas de Liga de la pasada campaña. Sólo se quedó sin ver puerta en seis compromisos, tres en la primera vuelta y otros tantos en la segunda. No marcó en las visitas a La Roda (0-0), UCAM Murcia (1-0), Villanovense (1-0), El Palo (0-0) y Arroyo (3-0) ni en casa ante el Sevilla Atlético (0-2). Sólo cosechó dos empates sin goles en todo el ejercicio anterior.

El equipo amarillo fue el segundo máximo goleador de toda la Segunda División B en el curso 2014/15 con un total de 66 goles en el campeonato liguero (un promedio de 1,7 tantos por encuentro), 11 menos que el Real Oviedo (77). La mayoría de los goles lo firmaron Jona (18), Airam Cabrera (13) y Juan Villar (12). Entre los tres hicieron 44, es decir, el 66,6%. Eso significa que el equipo dependía en buena medida del tridente goleador, ausente esta temporada. Jona y Juan Villar subieron un peldaño para incorporarse a clubes de Segunda División A. El malagueño milita en el Albacete y el onubense defiende ahora el escudo del Valladolid. El tinerfeño de Puerto de la Cruz es el que aún está sin equipo después de que el Cádiz no apostara en firme por su continuidad. La renovación en el ataque es total y ahora queda por despejar la incógnita de si Dani Güiza, Wilson Cuero y Lolo Plá son capaces de hacer olvidar a los tres artilleros que la pasada temporada fueron el asidero goleador de un equipo que anda inmerso en la constante búsqueda de la fórmula del gol con el inaplazable objetivo de conjugar el verbo ganar lo antes posible. El próximo sábado.