La ambición por conseguir la primera victoria fuera de casa en el campeonato de Liga marca el trabajo semanal de la plantilla del Cádiz, que hoy completa la última sesión con la vista puesta en la décima jornada. El entrenador, Antonio Calderón, ofreció ayer la habitual rueda de prensa de los viernes a modo de previa del partido del fin de semana, que en esta ocasión lleva al conjunto amarillo a la Ciudad Deportiva del Sevilla para medirse al segundo equipo de la entidad de Nervión. El técnico puso de manifiesto la mentalidad ganadora con la que el equipo afronta un partido que calificó de "muy importante frente a un rival poderoso en su campo". De hecho, el cuadro sevillista no conoce la derrota en su feudo y acumula un balance de tres triunfos y un empate.

El objetivo, como es lógico, es ir a territorio hispalense en busca de tres puntos que como mínimo mantendrían a los gaditanos en la quinta posición y darían posibilidades de acceder a la zona de privilegio reservada a los cuatro primeros clasificados. El preparador cadista no pasó por alto que el Cádiz tiene la oportunidad de "encadenar dos triunfos consecutivos en la Liga", señaló en la sala de prensa de la Ciudad Deportiva de El Rosal.

Calderón es consciente de que el equipo no está ofreciendo un buen juego, por lo que el reto en el desplazamiento a Sevilla pasa por "hacer un buen partido y conseguir la victoria. Sabemos que nuestra imagen no es la que todo el mundo quiere y pretendemos hacer bien y ganar".

De nuevo era preguntado el míster por el adversario, del que destacó que "dispone de futbolistas que han debutado con el primer equipo, que pronto jugarán en Primera División", aunque mostró confianza en los jugadores a los que entrena a diario. "Tenemos un buen equipo e iremos a plantar cara", apuntó el gaditano antes de vaticinar que el encuentro "no será nada fácil". De hecho, el duelo "va a exigir lo mejor de nosotros mismos, iremos concentrados".

Ganar fuera de casa en el torneo de la regularidad es una asignatura pendiente que quiere aprobar cuanto antes la escuadra cadista. "El equipo está cerca, sólo ha perdido un partido" - de los 12 disputados entre Liga y Copa del Rey-, indicó el responsable del banquillo antes de recordar, al referirse a las visitas, que "salvo en el campo del Jaén, siempre hemos ido por detrás en el marcador", algo que cuerpo técnico y jugadores quieren evitar. En general, "queremos mejorar, aunque los resultados están llegando".

Salió a colación el descontento mostrado por la hinchada el pasado domingo por el mal juego del Cádiz frente al Cacereño. La afición "está preocupada porque la imagen del equipo no es la idónea, la gente quiere ver jugar bien a su equipo y que gane. No me gusta que pase eso -las airadas protestas del pasado domingo- pero nuestro objetivo es cambiarlo con juego y victorias".

A su juicio, el equipo amarillo "inicia los encuentros de la misma manera ya sea fuera o en casa, no es una cuestión de ansiedad por jugar en un sitio o en otro, es ansiedad por ganar".

"Respetamos a nuestra afición, que nos apoya siempre, juguemos en casa o lo hagamos fuera. Con su ayuda conseguiremos los tres puntos y luego estará con nosotros en casa", subrayó Calderón antes de añadir que "la afición es exigente porque tenemos un objetivo grande, si el equipo lo da todo la gente estará contenta".

No esconde la realidad el míster, que confía en la evolución del equipo. "No se da la mejor imagen. Tengo la confianza del presidente (Manuel Vizcaíno) y el director deportivo (Jorge Cordero). Entiendo la frustración y la preocupación de la gente porque no se da la mejor sensación, pero hay un vestuario unido, con los partidos llegará la mejora", concluyó.