El Ayuntamiento de Algeciras tendrá que afinar mucho en las condiciones del próximo pliego para la gestión de la plaza de Las Palomas. La empresa Fomentauro, capitaneada por los empresarios José Luis Lara y Curro Matero, han finalizado tras la última corrida del pasado viernes su etapa como gestora del coso algecireño.

Y no es que hayan terminado celebrando una gran feria en cuanto a lo económico se refiere. Solo hay que ver las entradas registradas en las dos corridas celebradas. Un cuarto largo la tarde del jueves y media plaza el viernes en el cartel "estrella".

Y es que la celebración del Mundial de Fútbol y la posibilidad de que la selección española jugara el sábado por la tarde su partido de octavos de final, obligó a la empresa a no programar nada ese día. Tampoco cabía la posibilidad de dar el sábado por la noche el festejo de rejones, donde se registraba una buena entrada en Las Palomas. El motivo, el montaje del espectáculo de los fuegos artificiales.

A todo lo anterior le sumamos que el último domingo no había feria. En definitiva, que si a la feria taurina le quitas, por diferentes motivos, los dos días fuertes para dar toros en Algeciras como son el sábado y domingo de feria, pasa lo que pasa. Tristeza en los tendidos y pérdidas por parte de los empresarios, tal y como confirmaron a este diario.

Es cierto, que a lo mejor se podía haber probado organizar una corrida de toros con un cartel atractivo el último domingo, aunque no fuera feria. Pero la empresa Fomentauro no estaba para muchas probaturas, después de los resultados del pasado año y vaticinando lo que podía pasar en esta feria.

A partir de ahora, el Ayuntamiento comenzará a redactar un nuevo pliego que sea de interés para el panorama empresarial y sin abusos. No vaya a pasar como en la plaza de El Puerto, que solo acudió un empresario.

Un pliego en el que el tema económico se baje y repercuta aún más en la calidad de los carteles y en una buena promoción a todos los niveles. A todo esto se suma la idea de mantener la llama taurina durante todo el año en una ciudad y una comarca taurina, que demanda una serie de actividades culturales relacionadas con el toro con el objetivo de crear y mantener la afición.