Toros

Noche con hechuras toreras en Zalamea

ESTA Zalamea vive momentos dulces en su historial taurino. A la corrida mejor presentada de la temporada onubense le siguió en la noche del pasado viernes, una brillante entrega de trofeos taurino a la que le dieron el respaldo todos los triunfadores anunciados.

Hasta el mismo Antonio Ferrera, visiblemente mermado y en plena recuperación de su último percance, tuvo el gesto de presentarse en Zalamea a recoger su trofeo. Torería en la del extremeño, que además aguantó estoicamente la tardanza provocada por el Capea, metido en pleno atasco de tráfico cuando desde su Salamanca natal bajó también a recoger su galardón.

Ambiente importante como no mereció menos ese festejo de feria grande que propició una extensa nómina de triunfadores y la expectación de un numeroso grupo de aficionados que se dieron cita en el salón Ruiz Tatay para homenajear a los toreros.

Serían las palabras de Adolfo Lozano, presidente de la Peña taurina Zalameña, las que abrieran el turno de intervenciones tras las palabras de la presentadora Marianela Castilla, periodista zalameña y quien, con un perfecto trazo, marcó las directrices de un acto que aun en su sencillez dejó ver todo cuanto de cariño le habían puesto los organizadores del mismo.

Tras la las palabras de Vicente Zarza, alcalde zalameño, llegarían sin duda los momentos culminantes de la noche, que no fueron otros que el reconocimiento a cada uno de los galardonados. Así, y tras una breve presentación multimedia aludiendo a sus méritos como ganaderos y toreros, por el estrado del teatro zalameño pasó en primer lugar el ganadero de aquella corrida de Peñajara, José Rufino Martín, quien agradeció y animó a todos desde el reconocimiento a una afición que le transmitió cosas bonitas e importantes aquella tarde.

En la misma medida de intenciones y reconocimiento se expresarían posteriormente los toreros galardonados, desfilando por el estrado el propio Pedro Moya, a quien el jurado de la peña había designado como autor de la mejor estocada de aquella tarde septembrina.

Antonio Nazaré autor de la mejor faena y toreo de capote, seria el segundo matador que recogiera en la noche su trofeo, mientras que al torero extremeño Antonio Ferrera le correspondería el honor de recibir el destinado al triunfador de una feria importante que también tuvo opciones para premiar con merecimiento la labor de dos subalternos como fueron el banderillero Tomate de Jerez, autor del mejor par de banderillas y el picador de la cuadrilla Ferrera, Alonso Sánchez por su vara al cuarto toro de la tarde.

En el apartado de menciones, quien esto suscribe tuvo ocasión de recoger el reconocimiento de la Peña.

La jornada de un acto que contó además con representantes de las dos peñas valverdeñas, la Tendido 12 de Huelva y la palerma de José Doblado se remató de forma agradable en el local de la propia peña con un generoso aperitivo por parte de los anfitriones de una jornada donde también asistió entre otros, el actual empresario, el taurino Emilio Moreno.

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