El torero colombiano Luis Bolívar triunfo ayer en la primera corrida de la Feria de Pentecostés tras cortar dos orejas en un festejo marcado por la cornada de 25 centímetros sufrida por Marc Serrano en su pierna derecha y que le llegó hasta el fémur. Alberto Aguilar saludó en su confirmación de alternativa.

Luis Bolívar pudo someter a un toro importante de mucha transmisión en una faena vibrante y en la que el torero expuso en todo momento para encelar al animal. Bolívar toreó con la mano muy baja y alcanzó altas cotas. Lo mató de una gran estocada y cortó una oreja. En quinto lugar sorteó al mejor toro del encierro, de Virgen María. Fue un toro muy bueno al que Bolívar construyó una faena maciza que rubricó de otra gran estocada, cortando otra oreja. En el sexto, buscó por todos los medios la Puerta de los Cónsules con otro toro de Virgen María, pero hizo un esfuerzo en vano.

Alberto Aguilar confirmó su alternativa con un toro noble pero con poca transmisión con el que estuvo dispuesto y aseado, aunque sin llegar a conectar nunca con los tendidos. No lo mató bien y saludó una ovación. Aguilar tuvo en cuarto lugar a un animal de mucha calidad del hierro de Santa Ana con el que construyó una faena muy entonada pero pinchó.

El segundo de la tarde hirió a Marc Serrano a la altura de la rodilla cuando lo pasaba de muleta. Fue un toro noble aunque también con falta de transmisión al que Serrano entendió perfectamente. Al rematar una serie el torero fue cogido, se quedó en el ruedo demostrando gran valor para estoquear al toro.