Andrés Roca Rey (Lima, 1996), quien vive en tierras sevillanas y al que está forjando el maestro José Antonio Campuzano, sufrió una cogida el pasado lunes en Villaseca de la Sagra (Toledo), al entrar a matar, con cornada en el muslo derecho de unos 18 centímetros y fractura de metacarpiano de la mano izquierda. El torero, ingresado en el Hospital Nisa Aljarafe, afirma: "Me encuentro bien. En diez días me quitan los puntos y, aunque perderé cinco novilladas, afrontaré la alternativa como un guerrero en el Coliseo romano de Nimes, donde reapareceré. Lo malo es que tengo fractura de metacarpiano y tendré la mano izquierda inmovilizada, con una férula, hasta el día antes de la alternativa. No podré entrenar con capote y muleta los días previos. Pero, aunque sea infiltrado, tengo claro que reaparecé en Nimes. Me motiva mucho. Son cosas de torero".

-¿Cómo vivió la cogida?

-El novillo derrotaba por el pitón derecho, con la cara arriba, quería coger. Por ese lado se entra a matar y sentí que me podía coger. Por no irme, me echó mano. Lo fácil es aliviarse. Podía haberlo cazado. Pero el toreo es pureza y es verdad y capacidad y entrega para hacerlo.

-¿Cuántas cornadas ha sufrido?

-La más fuerte es la de Villaseca. Las demás son más chiquitas, como la de Madrid o puntazos, como en Sevilla -con evisceración de un testículo- y cosas así.

-Apuesta siempre muy fuerte ¿No le importa que le cojan?

-Hombre, no es eso. No es que no me importe que me de una cornada un toro o que me parta un hueso. Pero son cosas de torero. Por eso hay que prepararse física, técnica y mentalmente. Y asumirlo para todo lo que venga y no creértelo cuando estás bien, ni venirte abajo si vienen mal dadas. Más que una filosofía tengo una forma de interpretar el toreo: con entrega y siendo fiel a mí mismo.

-¿Supone una mayor presión no llegar a la alternativa en plenitud?

-La responsabilidad siempre existe. Quiero ir a Nimes y asumir la tarde con la mayor responsabilidad del mundo e ilusión.

-Analice el cartel.

-Me hace mucha ilusión que mi padrino sea Enrique Ponce. Le dio la alternativa a mi hermano Fernando en Acho y ese día, cuando yo tenía unos cinco años, decidí que sería torero y que el maestro me diera la alternativa. Los sueños se van cumpliendo. El testigo es Juan Bautista, otra figura del toreo. Lidiaremos tres toros de Juan Pedro Domecq y tres de Victoriano del Río, dos ganaderías en las que he tentado. De Victoriano toreé el otro día una novillada en Collado Mediano y corté cuatro orejas y un rabo. Y la plaza de Nimes es una plaza perfecta.

-¿Cuántas corridas tiene previstas después del doctorado?

-Una, el 22 de septiembre, en Logroño, con Morante y El Juli. Y después me marcho a América. Torearé en México y en mi tierra. En la plaza de Acho de Lima toreo el 27 de septiembre un mano a mano con Ponce.

-¿Qué han planificado para la próxima temporada?

-En mi deseo está acudir a todas las ferias importantes.

-¿Ha hablado con Ramón Valencia -quien le apodera junto a José Antonio Campuzano- sobre su número de corridas para la próxima Feria de Abril?

-No. Si fuera por mí torearía casi todos los días en Sevilla. La Maestranza es una plaza muy torera. Cuando lo hice de novillero tuve sensaciones diferentes. Estoy deseando volver.