Aún se está rodando pero la nueva serie de La Sexta, Buen agente, está llamada a cubrir un hueco estelar en la próxima primavera. La cadena  cambiará a los zombies de The walking dead por una sitcom española cuya trama principal son los enredos de un grupo de vecinos que comparten como pueden el mismo rellano de la escalera. Será, la mayor apuesta de su joven historia en cuanto a ficción nacional, con el sello de la productora Globomedia.

-El título define bastante bien la idea de la serie, ¿no? Va de un agente y de la buena gente que lo rodea, ¿no es así?

-Sí, es un juego de palabras que nos gustó. La trama parte de un policía, interpretado por Antonio Molero (Fiti, en Los Serrano), que se separa de su mujer, que es Malena Alterio (Belén en Aquí no hay quien viva), y se va a vivir enfrente, con dos chicas. Yo soy Agus, su psicólogo y su mejor amigo. Así que más que de los buenos agentes, la serie va de las buenas gentes (risas).

-¿Cómo es Agus, el personaje que interpreta usted?

-Pues es una persona que entiende muy bien a los demás, pero no tanto a sí mismo. Su vida es un desastre y es un metepatas, lo que va a provocar muchas situaciones divertidas.

-Interpretándolo usted seguro que es un héroe, un galán caradura, como a los que nos tiene acostumbrados...

-No, no, para nada. Agus tira más bien a cobardón. Es cierto que le estaba cogiendo cierto apego a ese tipo de papeles, a los de galán baboso. Pero este personaje por fin me permite quitarme el traje de caradura. Me estaba encasillando y por eso me ha gustado tanto romper con lo anterior. El cambio me ha venido muy bien.

-Una comedia sobre vecinos. Esto me suena a 'Aquí no hay quien viva' o 'La que se avecina'...

-El escenario es el mismo, es cierto. Hay un descansillo en torno al que giran las historias de los distintos vecinos. Pero el tono es diferente. Tampoco vamos a inventar un género televisivo: la sitcom está inventada ya. Pero después de tantos barcos, romanos y piratas, se agradece algo más de andar por casa, una serie de actores, de guión, de buena interpretación y para reírse un rato y punto.

-En la comedia sí ha parecido que estaba usted encasillado... ¿El humor de Buen agente es del estilo de Camera café'?

-Me encanta la comedia. Con los tiempos que corren, prefiero que la gente se ría conmigo un ratito a que llore, la verdad. Pero el formato de Camera Café estaba muy marcado y no tiene nada que ver con una sitcom. El humor de Camera, además, rozaba lo surrealista, tenía un punto más loco. El de esta serie es más naturalista, más realista.

-Era la línea, más bien, de 'Gominolas', otra serie en la que intervino usted. Últimamente también le ha fallado Vaya tropa, el espacio de sketches de Cuatro basado en Vaya semanita ¿Le han servido estas desilusiones para reinventarse?

-Sí, Vaya tropa duró poquito. Nos pilló la época en que Cuatro estaba sufriendo toda la remodelación previa a la fusión con Telecinco. Pero tampoco me gusta poner excusas. Todo es cuestión de la audiencia. Si a ella no le gusta la idea, hay que asumirlo e irte. Con el tiempo aprendes que no se trata de ti sino del producto. Yo me dedico a hacer lo mío lo mejor que puedo. Pero ya me apetece un triunfazo, sí. Con esta serie va a llegar, seguro.

-Desde luego el elenco que le acompaña es para tener audiencia, eso seguro. ¿Está contento con los compañeros actores?

-Estoy encantado. Son gente con mucha experiencia. Aprendo mucho de ellos cada día. Además, como grupo humano, también me lo paso con ellos genial. Eso también cuenta y se transmite a través de la cámara luego.