Una leyenda del siglo XVIII entrelazada con una investigación policíaca actual. Una mezcla de géneros y de escenarios que convierten a Sleepy Hollow en una ficción diferenciada que ha sido renovada por una segunda temporada en Fox. Cuatro ofrece desde la pasada semana esta serie producida por Bob Orci y Alex Kurtzman (junto a Phillip Iscove y Len Wiseman), que revelan a este periódico algunos aspectos de su proyecto.

-¿Cómo se les ocurrió este concepto distinto de Sleepy Hollow?

-Bob Orci: Hay un joven con mucho talento por ahí. Se llama Phil Iscove. Me vino y me dijo: ¿Sabes, he tenido una idea sobre cómo hacer un Sleepy Hollow de hoy día? La forma de entrar en el día moderno es unirlo con ideas nuevas. Por ejemplo que Ichabod Crane se durmiera y despertara 250 años después de la Guerra de la independencia. Lo vimos claro. Yo respondí que dónde había que firmar para hacer realidad esa idea.

-Alex Kurtzman: En ese momento empezamos a desarrollar el proyecto juntos durante unos ocho meses. Cuando lo mandamos a la Fox, lo acogieron muy bien. Fueron muy comprensivos desde que empezamos y eso siempre es fundamental para que las cosas salgan bien

-¿Por qué en EEUU se vuelve a los que ya está escrito, a los superhéroes, a los clásicos, a la revisión de series tipo a Hawai 5.0?

-Alex: Sean nuevas o clásicas, hay historias que son intemporales y siempre gustan si se sabe mantener su estilo. Se convierten así en atemporales, aunque sean de época. Son historias que perviven durante las generaciones porque narran lo que somos. Sleepy Hollow, particularmente, era muy atractiva para nosotros, los norteamericanos, porque forma parte de nuestros terrores infantiles. Para mí, las vacaciones favoritas son las de Halloween. Y mi casa es básicamente un Halloween 365 días al año y lo pasó siempre bien con mi hijo.

-¿Cómo mentalizaron al reparto en una serie diferente?

-Alex: Estas historias de nuestra serie son muy conocidas y queríamos presentarlas sin asociaciones previas. Así que fue agradable descubrir un par de caras nuevas, que no fueran muy conocidas en televisión. Cuando haces eso, realmente entras en los personajes de una forma que probablemente no lo harías si los hubieras visto interpretando algo más con lo que estuvieras más familiarizado.

-Bob: En el caso de Tom Mison (Ichabood), en principio no íbamos por un actor inglés, pero cuando lo conocimos y lo vimos leer, nos dimos cuenta que durante nuestra Guerra de la Independencia muchos de los que lucharon habían venido de Inglaterra. Así que la idea de que este hombre con acento británico (si se escucha en versión original) es realmente el de los americanos que lucharon y murieron por este país. La idea de alguien con la inteligencia de Tom, viendo en qué se estaba convirtiendo el futuro Estados Unidos, tanto en su gloria como en los acontecimientos que estaban ocurriendo sería impactante para él. Y Nicole es una mujer realmente fuerte, capaz de interpretar la complejidad de una perdedora que es capaz de cuidarse a sí misma, y quien al conocer a Ichabod Crane tiene una simpatía hacia él porque ella sabe lo que es ser una marginada.

-Resúmannos esta primera temporada que veremos este verano en Cuatro.

-Alex: Hay mucha diversión, muchos sustos, mucho humor. Les aseguro que no hay nada parecido en televisión. Ni en Estados Unidos ni en España. Contamos nuestras historias en presente y en pasado, la historia abarca 250 años, 2 siglos y medio.

-Bob: La televisión está en un buen momento. Algunos de los mejores escritores, actores y directores están ahora en la televisión. Es un periodo de renacimiento. Y es un privilegio estar ahí.

-¿Qué otras series les gusta?

-Bob: Homeland. Lo que más me gusta de esta serie es que cada episodio podría ser el final. Seguimos ese camino. Tenemos un reparto tremendo y el objetivo es que el espectador tenga una experiencia cinematográfica cada semana.

-¿Sleepy Hollow es sólo terror?

-Prac.-Alex: Son terrores. Hay un terror sensacionalista y grotesco planeamos otros momentos con un terror de suspense, que es el que predomina en la serie. La serie tiene un misterio secreto como El Código Da Vinci, en el sentido de que estamos rescribiendo la historia, o ciertos acontecimientos paralelos de la historia que todos conocemos. Mantenemos el equilibrio entre el miedo, la violencia y la intriga. Gustará a los espectadores españoles, seguro.