Dice Jordi Évole, El Follonero, que él es más bien de trabajar poquito. Que con las dos entregas de Salvados por la campaña ya tuvo bastante. Pero a la cadena le gustó el experimento y les pidieron más. Así que, tras las elecciones, aquel equipo recién formado se lió la manta a la cabeza y empezó a buscar nuevos blancos para las incisivas preguntas de El Follonero. La Iglesia, cómo no, estaba en la lista.

La Sexta emite el domingo, a partir de las nueve y media de la noche, la primera entrega de Salvados por la Iglesia. “Vamos a tener a Rouco Varela, al Papa, a un obispo de la conferencia episcopal, a un cura rural que estuvo estupendo con nosotros, a gente que está dentro del Opus Dei y otros que están fuera...”, explica Jodi Évole. ¿Al Papa? El Follonero consiguió robarles una promesa a José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy antes de las elecciones de marzo, así que, con la Iglesia, quería apuntar alto. A lo más alto. Y se coló en el Vaticano. “Ha sido un reto. Me impresionó mucho la foto del Papa con un tricornio y quería saber cuánto costaba conseguir una foto como esa –cuenta Évole–. Con ese propósito fuimos  a llevarle la guitarra del Chiki Chiki, porque nos enteramos de que el programa iba el día después de Eurovisión y pensamos que encajaba bien, por las fechas”.  

La hazaña no fue fácil. Primero, porque el Vaticano es “un mundo pequeño, cerrado, donde mueves una ficha y se caen siete y donde te sientes bajo sospecha, sobre todo porque están poco acostumbrados al sentido del humor”. Jordi Évole se refiere a la dificultad de acceder a la audiencia papal. Pero también recuerda lo mal que él se encontraba ese día. Con gastroenteritis. “Fue un infierno. El corresponsal de El Periódico me recetó unas ampollas de una marca italiana que refuerzan la flora intestinal y aquello tuvo una entrada muy buena, pero una salida nefasta”. A pesar de todo, El Follonero asegura que lo más difícil no fue  entregarle una Luciana al Papa. Lo peor fue entrevistar a Rouco Varela. “Ha costado acercarse a él. Sólo hemos tenido un pequeño contacto y lo único que le saqué es que me regaló un pin, que me hizo una ilusión relativa”, bromea Jordi.

Bromea, pero asegura que no es fácil meterse con la Iglesia. “Al contrario. Es una institución muy hermética que todavía sigue teniendo o infundiendo un respeto adquirido durante siglos. Es mucho más complicado entrevistar a un obispo que a un político”.

¿Será más fácil con los toreros? Porque también habrá un Salvados por los toros. Y más reportajes dedicados a la televisión, al fútbol y al Ejército. “El mundo taurino es otra religión, incluso con una liturgia muy marcada. Tiene un encanto y una riqueza visual y de personajes increíble”. Pero no adelanta quién estará en ese Salvados. Sí dice, en cambio, que la Eurocopa será la excusa para los reportajes de fútbol. Que se irán a Austria a ver a España. Y que hablarán con Puyol, con Xavi, con Sergio Ramos y con ex jugadores como Michel.