Al día siguiente de que Canal Sur 2 dejara de emitir su señal, el presidente de la RTVA, Pablo Carrasco, explicó ayer ante los parlamentarios de la Comisión de Control de la RTVA las razones que han obligado a llevar a cabo este recorte. Según sus palabras, este ajuste, "el más significativo" de cuantos se han hecho en Canal Sur hasta el momento, se ha tenido que realizar ante la "difícil situación" por la que atraviesa la empresa.

Con la nueva parrilla que se ofrece desde este lunes, la televisión pública andaluza recorta en casi un 50% el coste de su programación, pasando de los 20,2 millones de euros del pasado ejercicio a los 10,8 millones actuales.

Aunque estos recortes no han sido entendidos por la oposición. Así, el PP considera que la nueva parrilla es "pobre" y con "diversidad escasa" y asegura que "desprecia la experiencia de los trabajadores y conduce a un camino de menos audiencia y menos ingresos", lo que a su juicio, "pone en grave riesgo la existencia de este medio público". De la misma forma, lamenta que la reducción de costes que se hace ahora no llegue por un aumento de la producción propia, por lo que considera que no se están optimizando los recursos para tener una programación con un mínimo coste. Por su parte, desde las filas de Izquierda Unida lamentan que la nueva programación haya "obviado de alguna manera" la programación infantil y juvenil, así como los programas dirigidos a grupos sociales. Desde el PSOE, en cambio, se muestran convencidos de que, con el presupuesto disponible en esta ocasión, la programación que se ha escogido es "la mejor posible". Alaban, además, que la RTVA sea "la primera televisión del mundo donde las personas con discapacidad van a poder ver la televisión en condiciones de igualdad". La respuesta de Carrasco a las críticas lanzadas desde el Partido Popular por la externalización de servicios es clara: Se ha pasado de los 74 millones de euros destinados al sector privado en 2008 a los 39 millones de euros estimados en 2012.

Por otro lado, en esta misma comisión de control parlamentario se rechazó (con los votos de PSOE-A e IULV-CA) la proposición no de ley presentada por el Partido Popular, en la que se instaba al director de RTVA, Pablo Carrasco, a crear una Comisión de Trabajo con representantes de la dirección de la empresa y de los trabajadores para estudiar propuestas de futuro que garantizaran la viabilidad de la empresa. En esta misma proposición no de ley se planteaba también la paralización de la nueva programación de Canal Sur hasta que fueran estudiadas en el ámbito de dicha comisión otras medidas que garantizaran una programación propia en Canal Sur 2 y que no supusiera ningún coste para la RTVA. Desde las filas socialistas aseguraron que Canal Sur, en las actuales circunstancias económicas, "necesita un voto de confianza" y criticaron al PP de querer privatizar la RTVA "como está haciendo en otras comunidades en las que gobierna".