El príncipe Carlos de Inglaterra, sus hijos Guillermo y Enrique, y el ex futbolista Pelé, entre otros, se han unido para rodar un breve film que se emitirá a través de YouTube para promover la protección del medio ambiente. 

En el corto, que durará 90 segundos, también participarán el Dalai Lama, los actores Harrison Ford y Daniel Craig -el último James Bond- y el cantante Joss Stone, que han prestado su colaboración a esta iniciativa del "Rainforest Project", organización que preside el príncipe. 

En el vídeo, Carlos de Inglaterra y sus hijos salen en defensa de los bosques tropicales del planeta, en una iniciativa que en el caso del heredero de la corona británica "no tiene precedentes", según destacó un portavoz de la Casa Real británica en declaraciones a la BBC. 

El príncipe, según su portavoz, está convencido de que a través de internet se podrá conseguir que cambie la percepción de la gente acerca de "un asunto que es de vital importancia". 

En los últimos meses, Carlos de Inglaterra ha incrementando sus declaraciones públicas en defensa de acciones urgentes para prevenir la deforestación y poner freno al proceso de cambio climático. 

Según ha manifestado, su objetivo es "crear una comunidad online para pedir, desde la base, acciones urgentes para proteger los bosques tropicales, sin los cuales sin duda perderemos la batalla contra el catastrófico cambio climático en el planeta". 

El primogénito de la reina Isabel II creó en 2007 el "Rainforest Project", que se dedica a buscar la manera de preservar las selvas que se ven amenazadas por el cambio climático. 

Su concienciación medioambiental le ha llevado incluso a reconvertir un viejo Aston Martin de su propiedad para que consuma un biocombustible elaborado a partir del vino en vez de gasolina. 

Pero su militancia medioambiental ha sido criticada en varias ocasiones por quienes le consideran un "ecologista de lujo". 

Hace dos años se le criticó por viajar en primera clase a EEUU, junto a 20 personas, para recoger un premio por su defensa de la Naturaleza, y el pasado mes de febrero se le tachó de hipócrita por realizar una gira por América Latina con el objetivo de defender la preservación medioambiental, que realizó a bordo de un jet privado. 

Carlos y su esposa Camilla viajaron a América Latina en un Airbus A319, que en las líneas comerciales tiene capacidad para 134 personas y que, en un viaje de 26.000 kilómetros como el que hizo el príncipe de Gales, emite a la atmósfera 322 toneladas de CO2. 

"El príncipe de los hipócritas", tituló entonces a toda página el diario "Daily Mail", que añadía en su antetítulo: "Carlos se embarca en una cruzada 'verde'....a bordo de un avión privado". 

El parlamentario laborista Ian Davidson, miembro del Comité de Cuentas Públicas de la Cámara de los Comunes, manifestó que "es difícil justificar que el príncipe de Gales vuele a América del Sur para salvar el medioambiente llevándose a 14 miembros de su personal con un coste atroz, que convierte el viaje en absurdo".