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Málaga y el alto standing
Si se trata de que lleguen visitantes de elevado poder adquisitivo, la torre del Puerto es un atractivo idóneo. Otra cosa es que busquemos un turismo sostenible para una ciudad habitable. Málaga: la bolsa y la vida. Málaga: lo que importa.
Málaga: la bolsa y la vida
Mantener el discurso del éxito cuando la población sufre la erosión de derechos fundamentales es una invitación a la pregunta fundamental: ¿para quién se gobierna?. Málaga: lo que importa. Málaga: mi reino por un iceberg.
Málaga: lo que importa
A estas alturas ya no llama tanto la atención que los rasgos de identidad consignados en el escaparate se conviertan en mercancía, pero lo bueno es que la calle pone las cosas en su sitio. Málaga: mi reino por un iceberg. Málaga: el valor de los museos.
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Málaga: el valor de los museos
Uno esperaría no tener que encontrarse con la peor cara de la ciudad cuando va de visita a sus principales centros de referencia, pero quererse bien siempre cuesta un poco más. Málaga: instrucciones para buscarse la vida. Málaga: Paraíso para uno.
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Málaga: instrucciones para buscarse la vida
A tenor de los últimos sucesos en el Conservatorio Superior de Música y el Centro Principia, la lección parece clara: para qué vas a meterte en lo que no tiene futuro pudiendo dedicarte a tirar cervezas. Málaga: Paraíso para uno. Málaga, santa y barroca.
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Málaga: Paraíso para uno
La población de personas que viven solas sigue creciendo en la capital y su provincia sin que el fenómeno sea percibido como un problema, aunque igual podríamos apuntar algo respecto al modelo de nuestras ciudades. Málaga, santa y barroca. Carta de amor a Gerard Piqué.
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Málaga, santa y barroca
Todo el mundo debería ver la exposición ‘Fieramente humanos’ en el Museo Carmen Thyssen y, de paso, reivindicar la memoria de aquella ciudad y aquel tiempo, latente aún aunque amenazada. Carta de amor a Gerard Piqué. Málaga: no es gran cosa.
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Carta de amor a Gerard Piqué
Tú no les hagas caso, son unos desagradecidos, así te pagan que los pongas en el mapa y que contribuyas a que hablen de Málaga en todo el mundo mientras esperan tu magnífico hotel como perritos falderos. Málaga: no es gran cosa. En la Málaga de papel.
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Málaga: no es gran cosa
Que el coste de la vida sea cada vez mayor entra dentro de cierta lógica de la resignación. Pero al ciudadano puede costarle más asimilar que el fruto de su esfuerzo se lo lleven otros. En la Málaga de papel. Málaga: lo legal y lo cívico.
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En la Málaga de papel
Ahora uno sale a comprar el periódico con espíritu clandestino, como si hiciera algo malo, como en busca de una sustancia ilícita por la que habrá de rendir cuentas en caso de ser descubierto. Málaga: lo legal y lo cívico. Málaga contra los refugios climáticos.