La violencia de género, suma y sigue. Dos nuevas mujeres asesinadas a manos de sus parejas o ex compañero sentimental han pasado a engrosar la lista de las 36 mujeres -34 víctimas oficiales a la espera del acta de confirmación de las dos últimas- que han fallecido de manera violenta en lo que va de año.

En la madrugada del martes,5 de agosto, un hombre de nacionalidad venezolana de 32 años, Juan Carlos C.Y, se presentó en la comisaría de Figueras (Girona) confesando haber matado a su ex pareja una chica de nacionalidad hondureña de 20 años.

El presunto asesino, que fue acusado de un delito de homicidio doloso tras haber confesado, llevó el cadáver de la joven hasta la comisaría en el maletero de su coche.

La familia de la joven, que regentaba una carnicería donde ella trabajaba, denunció la desaparición de la chica.

Por otra parte, horas más tarde, en Barcelona un hombre de 26 años, Nacer E.S, de nacionalidad española también confesaba a los Mossos d'Esquadra haber matado a su pareja, de 50 años, después de una fuerte discusión.

Los Mossos se desplazaron hasta el domicilio, situado en el distrito de Grácia de la Ciudad Condal, y encontraron a la mujer todavía inconsciente pero tuvieron que certificar su muerte poco después.

Según los datos del ministerio de Igualdad, estas dos muertes elevan a 36 el total de mujeres asesinadas a manos de sus parejas o ex parejas en lo que va de año. En el mismo periodo de 2007, murieron un total de 48 mujeres por violencia de género llegando a hasta las 71 a finales de año.

Los meses de verano, según la estadística del Instituto de la Mujer, es el periodo del año en el que se producen más muertes por esta lacra. Así, en 2006 de un total de 68 mujeres que fallecieron en todo el año, 19 lo hicieron entre junio y agosto y en 2007, cuando murieron 71 mujeres, 26 de ellas lo hiceron en verano.

Hace sólo unas semanas se cumplían tres años de la entrada en vigor de la Ley contra la Violencia de Género que tenía como objetivo acabar con un problema que en los últimos cinco años ha terminado con la vida de más de 300 mujeres. Desde el Gobierno, la vicepresidenta primera María Teresa Fernández de la Vega insistió en que esta ley -que todavía no ha conseguido reducir el número de mujeres que mueren cada año- tiene una proyección a largo plazo.

De la Vega explicó que para ver los efectos de la ley "tiene que pasar más tiempo" porque se trata de cambiar hábitos que tienen que ver con cambios de la cultura.

Sin embargo, a medida que pasa el tiempo y siguen sumándose nuevas víctimas, se multiplican las voces que piden una reforma de la Ley. Así, a finales de julio, todos los grupos políticos, a excepción del PSOE, acusaron a la ministra de Igualdad, Bibiana Aído de ser "autocomplaciente" y exigieron una reforma de la ley.

A la vuelta de vacaciones se celebrará la Conferencia de Presidentes que tendrá como único orden del día la Violencia de Género y que tendrá como objetivo buscar mejoras para la ley.