Hace 34 años la figura del sereno era la más característica en los barrios de las ciudades... Encender las farolas o informar de la hora eran algunas de sus múltiples tareas. Pero los tiempos cambian y a veces se dejan en el camino objetos, costumbres e incluso oficios que desde su origen son auténticos y útiles y deberían perdurar en el tiempo.
Por esto nace el Movimiento 1887, con la intención de recuperar las cosas buenas del pasado que merecen la pena conservarse y trasmitir de generación en generación. El sereno del siglo XXI toma buena nota de los trucos y consejos de quienes en su día dejaron en lo más alto esta profesión, sabiendo que debe adaptarse a los nuevos tiempos, cambiando, por ejemplo, el tradicional "chuzo" por un teléfono móvil.
El sereno vuelve con fuerzas y preparándose a fondo para afrontar la noche con las pilas cargadas y los ojos bien abiertos.
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