Sociedad

Un experto cree que una secta puede estar tras la muerte del bebé en Santiago

  • Un jurista argentino sostiene que la madre de la niña pudo ser inducida por su marido y por "los dirigentes gnósticos" para que asfixiase a su hija.

Un abogado argentino ha presentado documentación en el juzgado gallego que investiga la muerte de un bebé al que presuntamente quitó la vida su madre, por creer que puede estar detrás la secta de los gnósticos, que se reunieron en Santiago, cita a la que la mujer fue con su marido. El letrado Héctor Walter Navarro, especializado en el análisis y persecución de estas doctrinas falsas, ha reclamado que "por favor se indague en la posible relación" entre el trágico fallecimiento de la pequeña y la realización del XII Congreso Gnóstico Internacional de Antropología.

Este jurista, que preside la Red de Apoyo para Víctimas de las Sectas y que se ha desplazado a Compostela con motivo de este fatídico episodio, confiesa sentirse "muy apenado" por este suceso, en su caso con un mayor motivo, puesto que pretendía visitar la capital gallega en el marco de este cónclave, pero finalmente no pudo ser, y su intención ahora es pelear porque "hechos como este", que pueden ser debidos a esta causa, "no se repitan". Su convicción es que la madre de la criatura, que según las investigaciones practicadas habría asfixiado a su hija, pudo ser inducida a ello por su marido y por "los dirigentes gnósticos", que predican la existencia de una realidad que es desconocida por el resto de seres humanos no afines, haciéndose de esta manera poseedores de la única interpretación válida.

En su peculiar modo de entender el mundo, cobra especial importancia la llamada "alquimia sexual", que estipula que las relaciones íntimas están permitidas únicamente dentro del matrimonio y siempre y cuando no se produzca una eyaculación, puesto que entonces se formaría el diablo en el interior de esa pareja y se entraría en el reino de las tinieblas. Héctor Walter Navarro sugiere, por tanto, que se sopese que este hecho desafortunado puede obedecer, no "a un acto individual y demencial", y sí a la ejecución de los dogmas y prácticas de los gnósticos, sobre todo porque existen casos similares, al menos en Argentina y en Bolivia.

En base a todo el tiempo que ha estado estudiando sobre ello, el experto piensa que una de las hipótesis que pudo provocar este desenlace es que se haya incumplido precisamente la alquimia sexual, que establece que el hombre "nunca, nunca, nunca" puede eyacular y la mujer no ha de llegar al orgasmo. Uno y otro han de interrumpir el coito cuando sientan el peligro de que pueda producirse "la eyaculación del semen por parte del hombre, ya que según estas doctrinas distorsionadas, el varón perdería de forma innecesaria grandes cantidades de energía".

El perfil de adeptos a los "gnósticos", prosigue, es el de personas con estudios universitarios que mantienen una relación sentimental y tienen "posibles económicos", pero no hijos, así que quizás "para esta pareja pudo suponer un problema haber participado en el congreso celebrado en Santiago con su hija de escasos meses". Otra de las conjeturas a valorar es que pudiese haber una infidelidad.

El bebé, la víctima, falleció el último día de agosto en un hotel de las afueras de Santiago de Compostela y el informe preliminar de la autopsia reveló que se trató de una muerte no accidental. La madre fue detenida y el padre del bebé no se encontraba en el establecimiento hostelero en el momento en el que todo sucedió. La razón que adujo es que había discutido con su mujer y que salió a dar un paseo, en el que aprovechó para visitar la catedral en la plaza del Obradoiro. En esa caminata recibió una comunicación telefónica en la que se le informó de lo acontecido.

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