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Por qué hay un diablo comiendo helado en la fachada de la catedral de Salamanca

Por qué hay un diablo comiendo helado en la fachada de la catedral de Salamanca

Por qué hay un diablo comiendo helado en la fachada de la catedral de Salamanca

La Catedral Nueva de Salamanca cuenta en una de sus puertas, la conocida como de Ramos, con varias figuras muy curiosas e impropias de la época en la que se construyó el edificio.

Estas imágenes, célebres entre los visitantes de la ciudad castellano leonesa, se han convertido en un reclamo para los turistas que cada año las fotografían, manosean por estar algunas a escasa altura, y a veces dañan como ocurrió con el célebre astronauta, o últimamente con el diablo comiendo helado. 

El motivo de las esculturas contemporáneas en la Catedral Nueva de Salamanca

Las figuras contemporáneas fueron esculpidas en una restauración llevada a cabo a principios de los años 90. Concretamente a finales de 1991, con el beneplácito patrimonial y catedralicio y la coincidencia de la celebración salmantina de Las Edades del Hombre y el V Centenario del Descubrimiento de América, los canteros encargados de reformar la Puerta de Ramos decidieron dejar en las paredes primigenias del siglo XVI, algunos 'toques' modernos y se incorporaron así dichos elementos a la fachada que atraen la curiosidad de quienes visitan Salamanca.

Así pueden observarse en la Puerta de Ramos salmantina figuras como un perro comiendo uvas, un lince, una cigüeña o un búho entre las más famosas del diablo comiendo helado o el astronauta.

La figura del diablo, rota en una de sus patas

Al estar las figuras a una altura accesible, las esculturas no han escapado de los vándalos y piezas como el astronauta, que perdió en tiempos un brazo, o ahora el diablo comiendo helado han sido objeto de deterioros premeditados.

El alcalde de Salamanca, Carlos García Carbayo, ha manifestado que es una "pena" la rotura de la figura del diablo comiendo un helado, reconociendo que las partes bajas de los edificios patrimoniales son las que más "sufren" deterioros de este tipo y ha animado a las personas a "cuidar" los monumentos a los que se acercan para conocer y fotografiar sus peculiaridades.

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