Congestión nasal, ojos llorosos, picazón en la nariz, los ojos y el paladar, dificultad para respirar e incluso, síntomas de asma. Con la llegada de la primavera también lo hacen unos meses complicados para miles de alérgicos.

La primavera de este año 2020, que oficialmente entre el día 20 de marzo, se prevé dura para las personas que tiene algún tipo de alergia, ya que las lluvias y el invierno suave que hemos tenido auguran tres meses duros. 

Recuerdan en el portal Eltiempo.es que la llegada de las altas temperaturas y las precipitaciones propias del final del invierno y la primavera coincide con uno de los periodos en los que se registran los mayores índices de polen. Pero, en función de la condiciones meteorológicas de este año "se espera una primavera de alergia intensa, de un modo similar a otros años, y dentro de la normalidad. Aunque hay que tener en cuenta que estas son solo unas previsiones que pueden variar en función de las precipitaciones que se puedan producir en las próximas semanas y en el mes de abril".

Primavera, tiempo de pólenes.

Según explica el alergólogo Javier Subiza, para Eltiempo.es, las informaciones sobre cómo será la primavera que nos espera "están supeditadas a la cantidad de lluvia que pueda caer y al frío que pueda hacer durante esos meses en los meses de abril y mayo".

En principio, en Madrid, la primavera será especialmente dura en cuanto al polen de gramíneas, aunquesiempre dentro de la normalidad. "No obstante, desde luego en los meses de marzo, abril y mayo, “no se van a registrar valores bajos de polinosis”, explica Subiza.

En España hay más de 8 millones de personas son alérgicas al polen, y en muchas partes del país ya se han comenzado a notar los primeros síntomas.

Principalmente el desarrollo del polen se da en la primavera. Los meses de abril, mayo y junio suelen ser los más afectados. La alergia al polen se llama polinosis o fiebre del heno.

Comienza la polinización

Niveles de polen, SEIAC

Las condiciones meteorológicas de estos últimos meses han provocado que muchas plantas adelanten su polinización. Según los registros que utiliza la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica, los dos primeros meses del año ha sido de los más cálidos de las últimas décadas más la ausencia de lluvias, factores clave para que esta primavera las concentraciones de polen sea altas.

El viento y la precipitación son los factores más importantes a la hora de limpiar la atmósfera, y la falta de ellos ha hecho que más de un alérgico note esa sensación de picor y malestar antes de tiempo.

Para poder prevenir la alergia o para conocer el nivel de alerta, se pueden consultar los niveles de polen a través de aplicaciones móviles avaladas por la SEIAC, como la llamada 'Polen Control', o en la página web www.polenes.com.