Un bebé de seis meses que fue arrojado el pasado miércoles por su madre por una ladera de la costa sur de Fuerteventura ha fallecido poco después de mediodía de hoy en el Hospital Insular de Gran Canaria, donde permanecía en estado "muy crítico", ha informado la Guardia Civil.

El fallecimiento se produjo sobre las una menos cuarto de la tarde, ha indicado las fuentes, que informaron de que su madre, de 36 años, que sufre una fuerte depresión postparto, continúa ingresada en la Unidad de Salud Mental del Hospital General de Fuerteventura.

La juez ha ordenado hoy el internamiento psiquiátrico de la madre. Tras el examen realizado por un médico forense a la presunta parricida, la juez ha decidido no tomarle declaración "hasta que no mejore su estado de salud mental".

Según la Guardia Civil, la madre del bebé acudió el pasado miércoles por la tarde a la oficina municipal de Costa Calma, porque, según relató, su marido quería ingresarla en un psiquiátrico y quitarle a su bebé.

La Policía Local avisó entonces a la Guardia Civil, que localizó a su marido y pudo ver cómo habló con su mujer en plena calle y le decía que llevaba meses muy mal y que la quería ayudar.

El marido le dijo a su mujer que no tenía intención de quitarle a su hijo y que se iba a poner en contacto con su cuñado en Uruguay para que se fuera con su bebé junto a su familia, para así recuperarse.

Así mismo, el marido le dijo que iba a pedir la tarde del miércoles libre para estar con ella, pero, cuando volvió a su casa, su mujer ya se había ido y había arrojado por un terraplén de cinco metros de altura al bebé, que cayó sobre unas piedras y se golpeó la cabeza, en la zona de Costa Calma, en el sur de Fuerteventura.

En la madrugada del pasado miércoles otra madre, que también sufría una depresión postparto, asfixió a su hija de pocos meses en La Palma.