Ecce-homo

Tensión contenida a las puertas de San Pablo

  • Las cuadrillas desarrollaron con éxito la complicada maniobra de salida

La expectación y la tensión se mezclaron ayer con el olor a incienso en la estrecha puerta de la también angosta iglesia de San Pablo. El hermoso a la vez que dificultoso reto de poner en la calle a Jesús de Ecce-Homo y a María Santísima de las Angustias costó sudores a los cargadores de ambas cuadrillas, que se esmeraron para que la salida de sus titulares se desarrollaran sin sobresaltos. 

Puntual, a las cinco y cuarto de la tarde, las puertas del templo se abrieron y la cruz de guía inició el desfile. Los cargadores del paso de misterio fueron ocupando sus puestos no sin antes regalarse sentidos abrazos. Con la primera ‘levantá’, rubricada por el veterano cofrade y hermano de esta archicofradía Francisco Arenas Martín, enmudeció el templo y afloró una tensión contenida.

“Patas fuera” fue la primera orden del capataz,  Juan Manuel López Gallardo. Una vez puestas las ruedas, le siguieron otras: “Avanzamos”. “Hacia la derecha”. “Quietos”. “Atentos a la bajada”. “Un poquito a la izquierda”. “Al frente”. “Aguantando la bajada”. Y con el empujón de los aplausos, Jesús del Ecce-Homo salió a la calle sorteando la reducida anchura de la puerta. Tras una ‘levantá’ suave, inició el desfile. Le siguieron los sones de la marcha Ecce-Homo.

Minutos antes de las seis, Arenas Martín asumió también la primera ‘levantá’ del paso de la Virgen de las Angustias. De nuevo se hizo el silencio, y de nuevo el ambiente se volvió tenso. Sobre ruedas y con sólo algunos cargadores bajo el paso y de rodillas, el capataz, José Javier Reyes, inició la complicada maniobra de salida. “Vamos a echarle corazón”, se animaron los propios cargadores. Y “sin correr”, como les pidió Reyes, el paso dejó atrás el ceñido umbral.

Lluvia de aplausos y sonrisas de recompensa para la  tenaz cuadrilla. Aplausos también y miradas llenas de lágrimas para la Virgen, que inició su desfile con la marcha Angustias que estás en los Cielos.

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