Uno de os miembros del cortejo de Medinaceli bien sabe lo que es el título que le sigue a este Señor como es el de Cautivo y Rescatado. Cautivo porque es un interno de Puerto III y Rescatado porque a partir de ahora esa persona va a poder acceder al tercer grado telemático. Esta iniciativa se ha llevado a cabo gracias al estrechamiento de relaciones entre esta hermandad e 

En la iglesia de Santa Cruz apenas diez minutos antes de la salida había mucho ajetreo y no hacía indicar la rigurosidad y el silencio que se hizo muy poco tiempo después cuando el párroco de Santa Cruz, Rafael Fernández, empezó a hablar desde el altar, momento en el que se han abierto las puertas de la iglesia. 

Éste ha dicho que al Señor de Medinaceli "no le hace falta salir en procesión porque durante todo el año viene a verlo pero esta estación de penitencia es muestra del amor que le tenemos". Fernández dijo que como apunta el Papa Francisco, "somos Iglesia que salimos a la calle y que no nos avergonzamos de nuestra condición de cristianos".

Una vez que salieron todos los penitentes del Cristo, el paso del Señor de Medinaceli empezó a avanzar hacia la puerta dirigido por el veterano José Luis Pájaro Llamas, una institución en los martillos gaditanos. Poco antes, muchos de los cargadores se le abrazaban con sus camisetas en las que pone el lema "fe, amor y sacrificio".

La maniobra del Señor era contemplada por la larga penitencia que tiene por devoción a este Cristo, aunque es menos numerosa que antaño. Y allí, la Virgen de la Trinidad pasó a dirigirse a ruedas poco a poco hacia la puerta de grandes dimensiones en Santa Cruz, donde le esperaba un público numeroso pero menos callado que lo que requería la ocasión.

A partir de ahí cogieron el Campo del Sur para dirigirse a la entrada en la carrera oficial, esta vez sin el susto que tuvieron hace tres años, cuando tuvieron que retrasar su salida y, posteriormente, modificar su recorrido debido a la caída de unos cascotes de la fachada de la iglesia de San Juan de Dios.