Pese a que los actos previos a la Semana Santa se han celebrado bajo las estrictas medidas de seguridad por la pandemia, El Puerto de Santa María no han faltado a las citas tradicionales que preceden a esta festividad religiosa como son la presentación del documental que sustituye al pregón, el Vía Crucis del Consejo de Hermandades y la presentación del cartel anunciador, que en esta ocasión recoge el lema de la Semana Mayor portuense: 'El año sin primavera'.

 Los desfiles procesionales se han suspendido por segundo año consecutivo, por lo que no habrá cofradías en la calle, aunque en esta ocasión, y a diferencia de la Semana Santa de 2020 que se vivió en pleno confinamiento, las hermandades han podido elaborar una serie de actividades, que evitan las aglomeraciones, y en las cuales no se han dejado de celebrar los cultos religiosos propios del tiempo de Cuaresma, que van preparando a los fieles para la Semana Santa, que comienza mañana con el Domingo de Ramos. 

"A pesar de las circunstancias que vivimos y la suspensión de los desfiles procesionales, la vida de hermandad sigue, la Cuaresma se vive y la Pascua de Nuestro Señor la celebraremos", confirman los cofrades portuenses. 

Nuestro Señor Jesucristo en su Entrada en Jerusalén, junto al Cristo de la Salud, en la parroquia del Carmen.

En El Puerto, La hermandad de La Borriquita lleva sobre sus hombros la responsabilidad de abrir la Semana Santa. De esta forma, este Viernes de Dolores, a las 19:00 horas celebró su Vía Crucis parroquial en la iglesia del Carmen y San Marcos, sede canónica de la cofradía, con la presencia de autoridades políticas y religiosas (entre ellos el párroco Antonio Durán), la junta directiva y miembros de la propia hermandad y representantes del Consejo Local de Hermandades y Cofradías. Ya viene siendo habitual que los vía crucis se celebren de manera estática, es decir priorizando el rezo en lugar de la itinerancia de las imágenes por el interior de las iglesias, con lo que se minimiza el riesgo de aglomeraciones, que se pretenden evitar a toda costa, por lo que en todo momento la entrada a las iglesias se hará de forma escalonada. Compartieron espacio junto al altar mayor presidiendo el Vía Crucis la imagen titular de la hermandad y el Cristo de la Salud.

La hermandad de La Borriquita afronta este domingo su jornada grande, donde las puertas de esta iglesia de Crevillet estarán abiertas desde las 16:00 a las 21:00 horas para visitar a los titulares de la hermandad: Jesucristo en su Entrada en Jerusalén y Nuestra señora de la Entrega. Para realizar el acceso escalonado al templo, se habilitará la entrada por la puerta principal de la calle Aurora y la salida será por las puertas laterales. En ese intervalo, a las 16:15 se hará la oración ante los titulares; el rezo del santo Rosario a las 18:00 horas y la eucaristía de las palmas a las 19:00 horas. Durante dicha eucaristía estarán presentes las palmas del Domingo de Ramos, características en las salidas procesionales, y que portarán los miembros de la cofradía tras haberlas recogido previamente en la secretaría de la hermandad, las cuales serán bendecidas durante la misa. Además,habrá otras dos misas para la bendición de palmas y ramos de olivo, por la mañana, a las 11:30 y a las 13:00 horas.

Los titulares estarán ataviados con sus mejores galas para un nuevo Domingo de Ramos, vestidos por David Calleja. De esta forma, según informa la hermandad, Nuestra Señora de la Entrega luce ya en el pecherín una antigua tira bordada de seda beige del S.XIX, flanqueado por encaje dorado de hojilla; saya bordada en oro sobre tisú dorado y manto de terciopelo verde oscuro enriquecido con cordón dorado. Nuestro Señor Jesucristo en su Entrada en Jerusalén lucirá túnica de terciopelo beige bordada en oro y mantolín de brocado del mismo color, burdeos y dorado.

Finalmente, dentro de la bolsa de caridad, y en la labor social que las hermandades vienen desarrollando durante toda la pandemia, en un comunicado de la cofradía se insta a los hermanos a que cuando acudan a razar a los titulares "con el corazón abierto a la solidaridad", se cambie la tradicional ofrenda floral por una ofrenda de alimentos que se depositarán a los pies de los titulares y tras ser bendecidos el propio Domingo de Ramos ayudarán a las familias más necesitadas a través de Cáritas Parroquial.