17 años después se ha comprobado que las cabezonerías tienen el peso argumental que tienen y el recorrido muy corto. Década y media después de la férrea posición del cabildo, que derivó incluso en la destitución de toda una junta de gobierno y el nombramiento de un comisario, ha quedado comprobado que la fórmula de llevar la imagen del Resucitado a la Catedral en su paso a primera hora de la mañana del domingo no era nada descabellado. El tiempo dio la razón a Columna, aunque con bastante demora, y la cofradía pudo liderar la brillante culminación de la Semana Santa de este año, con una procesión de regreso que tuvo bastante seguimiento y que dio un ambiente extraordinario a las calles del casco histórico.

Desde bastante temprano se inició en Cádiz el Domingo de Resurrección, con el traslado a las ocho y media de la mañana de la imagen, sobre el antiguo paso de misterio de Columna que ha sido restaurado y plateado y con los candelabros del actual paso que este año estrenaban dorado. Fue dispuesto enfrentado a la puerta de Arquitecto Acero, permaneciendo allí durante el pontifical de Resurrección que presidió el obispo diocesano, Rafael Zornoza, y que contó con el brillante acompañamiento de la capilla musical de la Catedral, especialmente lucida ayer en el canto del Gloria.

Al término de la misa, que duraría alrededor de hora y media, las hermandades que acudieron a la invitación de la Resurrección para formar parte del cortejo (con guión y un máximo de cinco varas, según instrucciones del Consejo) se dispusieron en la parte trasera de la Catedral siguiendo su protocolo de antigüedad e incorporando en los últimos lugares a la hermandad de Humildad y Nazareno, hermanadas con Columna.

Así, según el horario previsto, la cruz de guía de Columna asomaba a la una de la tarde por la plaza de la Catedral, tras abrir por última vez esta Semana Santa las puertas del templo, en este caso para que salga un cortejo y no para que acceda. Y desde la una y media de la tarde, el paso del Señor Resucitado recorrió las calles del centro con un buen ambiente en las aceras, especialmente por parte de los numerosos turistas que llenaban ayer la ciudad.

Las marchas de la gaditana agrupación Ecce Mater silenciaron la Semana Santa de 2022 alrededor de las tres y media de la tarde, cuando la imagen de González Rey hacía su entrada en la iglesia de San Antonio.