Los vigilantes de seguridad de las instalaciones municipales volvieron a protagonizar ante la puerta de Alcaldía una nueva movilización para recordar que siguen sin una solución a sus problemas laborales. El colectivo -formado por 17 trabajadores, que en su mayoría estaban ayer trabajando- vienen denunciando retrasos considerables en el cobro de sus nóminas, además de recortes unilaterales por parte de la empresa. Hay que recordar que el servicio está a la espera de que se licite un nuevo contrato y que desde la oposición se ha reclamado al gobierno que se implique para solventar esta situación.