Un año ha pasado desde que el Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía diera luz verde a la subvención de 3,5 millones de euros que permitirá afrontar la construcción del futuro Museo Camarón junto a la Venta de Vargas con cargo a la Iniciativa Territorial Integrada (ITI).

Fue el paso decisivo que, tras una larga espera que se remonta a principios del mandato y una complicada tramitación previa, condujo a que en octubre de 2017 la propia presidenta de la Junta, Susana Díaz, firmara con la alcaldesa isleña, Patricia Cavada, el convenio que da cobertura a la ejecución de este proyecto que La Isla lleva dos décadas y media intentando poner en marcha sin resultado alguno.

Los trámites para la adjudicación de las obras, que previsiblemente se llevará a cabo en unas semanas para que los trabajos comiencen a final de año o a principios del siguiente, se han prolongado durante casi doce meses. En realidad, se trata de un tiempo récord dada la complejidad de un proyecto que tiene que aunar también los intereses del Ayuntamiento, de la Junta de Andalucía y de la familia del artista. Primero, claro está, fue necesario licitar y adjudicar la redacción del proyecto, lo que se hizo con bastante rápidez entre finales de 2017 y principios de 2018. En mayo, el Ayuntamiento ya tenía en sus manos el proyecto de obra y museográfico para el centro de interpretación que se construirá en la Venta de Vargas, una experiencia que orbitará en torno a la vida y obra del mito del flamenco y que se valdrá especialmente de las nuevas tecnologías como recurso.

El paso siguiente fue la licitación de las obras, que se lanzó en plena Feria del Carmen, a mediados del pasado mes de julio. Un error detectado en el pliego de condiciones obligó en verano a rectificar y a modificar los plazos. El pasado viernes se cerró el plazo de presentación de ofertas para el Museo Camarón.