Las noticias de los últimos días han afectado, como no podía ser de otra manera, en la rutina de trabajo de las delegaciones municipales del Ayuntamiento isleño. Una de ellas ha sido la de Desarrollo Sostenible, y una de las tareas que pueden sufrir las consecuencias de estos cambios es la presentación del pliego de condiciones de los trabajadores del alcantarillado, los cuales siguen en huelga hasta que este pliego se les muestre y efectivamente comprueben que se certifican las modificaciones previstas.

Aunque la edil del área, Rosario Álvarez -que ahora asume nuevas competencias como la Delegación de Fiestas-, era cauta al respecto y se comprometía a intentar por todos los medios que en esta semana el asunto quedara suelto. "Si me puedo reunir con ellos el viernes lo haré el mismo viernes, ésa es mi intención, aunque no sé si lo lograré", afirmaba.

Lo cierto es que, tal como avanzara el comité de los trabajadores del alcantarillado, la reunión mantenida la semana pasada parece haber llegado a buen puerto. El entendimiento se consuma por tanto y así, apuntaba la edil andalucista, en el nuevo pliego ya ultimado se contemplan muchas de las peticiones de estos trabajadores, especialmente las básicas, que incluyen por ejemplo la ampliación en el número de empleados y la ampliación también del equipamiento necesario.

La propia Álvarez reconocía la necesidad de una mejora al objeto de garantizar un servicio más óptimo. De esta manera, bien sea a finales de semana bien sea en la próxima, añadía, la intención municipal es ahora que el asunto quede solucionado cuanto antes y que el servicio pueda restablecerse a la mayor brevedad posible. Bien es cierto que la huelga de los empleados de esta adjudicataria no ha tenido la repercusión que se esperaba, pero sí ha conseguido su objetivo, el de sentar en la mesa al Ayuntamiento.