En torno a 150 pinos de la ciudad fueron tratados por el área de Desarrollo Sostenible entre mediados de diciembre y finales de enero para eliminar de ellos la presencia de orugas procesionarias. Estos pinos, según informó el delegado del área, Fran Romero, se encuentran repartidos entre 35 zonas y barriadas e incluyen el entorno de seis centros escolares. En este sentido -recuerda- el protocolo de actuación del Ayuntamiento siempre ha sido muy claro: proceder de forma inmediata al tratamiento de estos árboles una vez que los técnicos del área o algún ciudadano advierten de la presencia de esta oruga, debido a la toxicidad de esta especie.

Entre las zonas tratadas se encuentran las proximidades de los colegios Erytheia, Constitución, Reina de la Paz, Raimundo Rivero, Casería de Ossio y Juan Sebastián de Elcano, así como en los parques Almirante Laulhé, del Oeste, del Barrero, Sacramento y el Cerro de los Mártires. También se ha actuado en las calles Eume, San Federico, Francisco Montes Aguilera, Doctor Castro Viejo, Juan Carbó, Emperador Carlos, Tercio del Mar Océano y Pintor Hernández Homedes.

Igualmente, otros de los puntos en los que se ha intervenido desde Desarrollo Sostenible son el paseo Joly Velasco, las avenidas Reyes Católicos y Al Ándalus y en las barriadas Madariaga, Puerto de Palos, Olmo, Blas Infante y Diputación así como en las proximidades del campo de fútbol Bazán, en el parque colindante al centro cívico de La Ardila, el de La Almadraba y las plazas Neptuno y Nao Victoria.