El centro de interpretación del parlamentarismo de la calle General Serrano vuelve a estar en el ojo del huracán. La escasa afluencia de visitas que registran estas dependencias ha llevado al equipo de gobierno a cuestionar seriamente su utilidad y a plantearse un uso alternativo para este equipamiento. Hace un mes, Loaiza anunció sus planes para aprovechar este edificio -cuya apertura al público costó 700.000 euros- como instalaciones complementarias del Real Teatro de las Cortes.

Quería que la finca, dadas las reducidas dimensiones del Teatro, se aprovechara para vestuarios y otros servicios de apoyo. Y contaba incluso con un anteproyecto para abordar su adecuación que, eso sí, se supeditaba al año 2013, una vez que hubiese pasado en su totalidad la conmemoración del Bicentenario de La Pepa y todos los actos conmemorativos de la efeméride constitucional.

Pero la Junta ha retirado al Ayuntamiento la subvención con la que contaba para abordar dichos trabajos que, entre sus aspectos más llamativos, incluían la ejecución de un túnel subterráneo bajo la calle General Serrano que uniría el centro de interpretación del parlamentarismo con las dependencias del Teatro.

La razón por la que la Delegación Provincial de Turismo ha optado por no conceder dicha subvención cuando los trámites para su concesión estaban muy avanzados (el Ayuntamiento, prácticamente, contaba con el dinero) no es otra -según el alcalde- que, precisamente, el haber cuestionado la utilidad del centro de interpretación del parlamentarismo y plantearse otros usos adicionales para estas instalaciones.

Porque esta es la clave. El Ayuntamiento -insistió Loaiza esta semana- no pretende dejar a un lado su uso como equipamiento cultural, como centro de interpretación. Al menos, no de momento. Su idea es alternar ambos usos, rentabilizar las instalaciones. Que el centro de interpretación siga abierto y que, al mismo tiempo, pueda ser aprovechado como edificio auxiliar para el Teatro de las Cortes.

"Si hay un equipamiento que deja de ser útil hay que replantearse su uso, cómo se va a reconvertir. Hasta ahora. La idea que tiene el Ayuntamiento es la de utilizarlo de las dos maneras, como centro de interpretación y como instalaciones auxiliares para el Teatro, aunque parece ser que eso no ha gustado (a la Junta)", explicó Loaiza.

Lo cierto es que el centro de interpretación del parlamentarismo hoy, un año después de su apertura, dista bastante de ser el punto neurálgico de la Ruta de Las Cortes, como se pretendía inicialmente. Antes bien, las instalaciones, que se mantienen abiertas por la aportación económica que realiza el Consorcio para la Conmemoración del Bicentenario -que asume los gastos del personal que trabaja en el centro- pasan prácticamente desapercibidas para ciudadanos y visitantes.

De ahí que el Ayuntamiento se haya cuestionado su uso de cara al futuro. Se trata -insistió Loaiza- de rentabilizar estas instalaciones que costaron 700.0000 euros (a través de los fondos del Plan E y de subvenciones del Consorcio). "¿Qué hacemos si no va la gente, si el centro de interpretación del parlamentarismo no tiene los resultados esperados, si no hay visitas?", se preguntó. "Pues el Ayuntamiento tendrá que replantearse otros usos, tendrá que aprovechar esas instalaciones e intentar rentabilizar este equipamiento", afirmó.

El montante de la intervención que se ha quedado en el aire, según explicó Pascual Junquera, delegado municipal de Infraestructuras, Vías y Obras, ascendía a 152.000 euros. La subvención de la Junta abarcaba el 60 por ciento. El Ayuntamiento asumía el 40 por ciento restante. Con todo, desde el equipo de gobierno se ha insistido a la Junta en que su propuesta pasa inicialmente por mantener el centro de interpretación abierto al público. Espera que la Administración autonómica reconsidere su postura y dé luz verde definitivamente a esta subvención para llevar a cabo las obras que el equipo de gobierno quiere hacer.

La viabilidad del centro, en todo caso, tal y como apuntó Loaiza, dependerá de la manera en la que estas instalaciones sigan funcionando. Si hay un número suficiente de visitas para garantizar su uso exclusivo como centro de interpretación, seguirá abierto como tal, dice. Pero el Ayuntamiento tendrá que replantearse otras opciones si el centro de interpretación -como sucede hasta el momento- no funciona, si es un fracaso. "Si somos capaces de poner en marcha actividades transversales, complementarias, que atraigan a la gente, funcionará. Pero si solo dejamos un cuartito donde veamos dos diapositivas, eso no va a tener éxito por mucho que le guste al Partido Socialista", apuntó.