El concejal de Presidencia y Gestión Presupuestaria, Conrado Rodríguez, lanzó ayer un mensaje de tranquilidad para alejar los temores de la ciudadanía ante una posible subida del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) derivada de una nueva actualización de los valores catastrales.

El gobierno municipal reconoció la existencia de dicha revisión de la que ha advertido Ciudadanos, pero también aclaró que no es una medida que haya solicitado expresamente el Ayuntamiento -como denunciaba la formación de Javier Cano, que criticaba además que no se hubiese informado de esta solicitud- sino que viene recogida en la Ley de Presupuestos Generales del Estado para 2017. "Se aplica desde hace tres años a los municipios que desde hace mucho tiempo tenían pendiente la actualización de los valores catastrales, que en el caso de San Fernando se remontaban a 1999", explicó.

Así, para evitar una drástica subida -un catastrazo en toda regla- durante los ejercicios de 2014, 2015 y 2016 se ha aplicado una subida gradual de un 10% anual. "Salvo en el primer año. en el que gobernaba el PP, siempre se ha compensado dicho incremento con una rebaja del tipo impositivo", aclaró el responsable del gobierno municipal en materia económica.

"Nosotros lo hicimos el año pasado para evitar que dicha subida repercutiera en los ciudadanos", precisó para dejar claro un compromiso que el ejecutivo está dispuesto a mantener en la redacción de las nuevas ordenanzas fiscales que entrarán en vigor el próximo 1 de enero. "En el importe neto del IBI se compensará la subida del valor catastral", afirmó sin dejar espacio a las dudas surgidas estos días.

Lo que todavía no está claro -de hecho, el Ayuntamiento espera que en los próximos días se lo comunique el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas- es a cuánto ascenderá esta revisión de los valores catastrales, que además sería la última que toca en este proceso gradual de actualización. En principio, se planteaba un periodo de cuatro años a razón de una subida de un 10% anual. Y, de hecho, así ha sido en los tres últimos ejercicios. No obstante, precisó ayer el concejal Conrado Rodríguez, para igualar esta actualización con los precios actuales del mercado puede que el incremento sea menor. De hecho, se espera que se quede solo en una subida de un 4%, seis puntos por debajo de lo previsto inicialmente.

Hasta que el Ayuntamiento no disponga del dato concreto no podrá hacer el cálculo para incluirlo en la redacción de las ordenanzas fiscales, que ya están "en estudio". Aunque todo se espera solventar pronto. De hecho, para asegurar la entrada en vigor de las ordenanzas el 1 de enero el proceso tendrá que iniciarse en las próximas semanas. Lo habitual es que se lleve a pleno su aprobación inicial en la sesión ordinaria de octubre.

"Desconocemos hasta el momento la cuantía que fijará. Esperamos que en varias semanas se nos informe al respecto para valorar y actuar. En cualquier caso -asegura Rodríguez- los isleños pueden estar tranquilos, porque el gobierno de la ciudad sabe perfectamente la situación económica actual. Y a pesar de la subida del valor catastral que pueda proponer el Ministerio de Hacienda, el Ayuntamiento actuará, desde sus competencias, sobre los valores catastrales, compensando desde las ordenanzas municipales".