Mantener embelesados, sentados y prácticamente callados a más de 100 alumnos de Primaria durante hora y media no es tarea fácil, pero tampoco imposible, pues así lo hicieron ayer los estudiantes del conservatorio profesional de danza Maribel Gallardo durante la demostración que realizaron en el Real Teatro de las Cortes.

Se trata del segundo y último pase dentro de una campaña promocional para captar a jóvenes promesas que se quieran iniciar en el mundo de la danza a través de las diferentes expresiones artísticas que se imparten en el conservatorio gaditano y que son clásica, española y flamenco.

En la jornada de ayer estuvieron presentes los alumnos de los colegios Juan Sebastián Elcano, La Ardila, Puente Zuazo y Vicente Tofiño. Si a estos añadimos los escolares del primer pase -de los colegios Quintanilla, San Ignacio, Reina de la Paz y Arquitecto Leoz- el total asciende a casi mil pequeños potenciales artistas, que disfrutaron y aprendieron con unas coreografías que abarcaban todo tipo de estilos.

Así, en el apartado de danza clásica, los alumnos del conservatorio interpretaron fragmentos de El lago de los cisnes, El Corsario y Giselle; en la sección dedicada a la danza española los jóvenes bailaron extractos de Bolero liso y Danza y algo más. Y en flamenco, el protagonismo lo acaparó el tango. El broche final del espectáculo lo puso la Danza del fuego con una cuidada puesta en escena con el Amor Brujo de Manuel de Falla como eje musical central.

Cada vez que el telón del Real Teatro de Las Cortes se levantaban, los escolares -absolutamente absortos con cada paso, con cada escena- a prendían algo nuevo de forma amena. Así, desde hoy reconocen las melodías de Tchaikovsky o Manuel de Falla. Distinguen a la perfección un tutú de plato de un tutú romántico. Saben que sin zapatillas de punta no se pude realizar un fouetté. Y conocen la diferencia entre un paso a tierra y un paso al aire. A más de uno lo dejarían con la boca abiertea.

Y todo gracias a esta iniciativa puesta en marcha por el consevatorio de Maribel Gallardo en estrecha colaboración con la Delegación Municipal de Cultura del Ayuntamiento de San Fernado. "El conocimiento de expresiones artísticas tan puras como la danza es un aspecto que también forma parte de la educación de nuestros jóvenes y que no debemos de descuidar", comentó el primer teniente de alcalde Francisco Romero, presente en el acto. "El futuro de nuestra cultura está en sus manos y depende de sus talentos, por ello debemos de animar a las nuevas generaciones a aprender y a formarse en toda modalidad de arte".

Por su parte, la jefa de estudios del centro Maribel Gallardo, Rocío López, explicó que en el conservatorio se imparten unas enseñanzas oficiales que permiten a los alumnos alcanzar licenciaturas universitarias una vez que finalizan el curso. "La danza es una disciplina de futuro con amplias posibilidades laborales", argumentó.

Aquéllos que estén interesados en inscribirse deben presentar su solicitud durante el mes de marzo en la sede del conservatorio, ubicado en la calle Arbolí, 5 de la capital gaditana, aunque en un breve periodo de tiempo se trasladarán a la Casa de las Artes de Cádiz. La edad mínima para matricularse es a partir de los 8 años. No obstante, si la persona ya tiene conocimientos de danza, puede optar a otros niveles.

"Invito a todos los jóvenes isleños a descubrir las ventajas que reporta la danza: favorece la igualdad de sexos; fomenta la comunicación; mejora la capacidad motriz, y por tanto, la salud; libera tensiones; estimula la memoria así como la expresión de ideas, emociones y sentimientos a través del cuerpo; ayuda a superar la timidez...", enumera la jefa de estudios. "Y todo esto aprendiendo arte".