Los alumnos del colegio de Educación Infantil y Primaria Arquitecto Leoz han podido finalmente disfrutar de su fiesta de fin de curso. Lo han hecho esta mañana, según ha informado la dirección del centro, todavía consternada por el lamentable altercado -una pelea entre dos familias- que en la tarde del jueves truncó la función de los pequeños cuando tan solo hacía unos minutos que había comenzado. 

Toda la comunidad educativa ha lamentado profundamente lo ocurrido, tanto más cuanto que la convivencia es uno de las cuestiones en las que más se trabaja y más hincapié se hace desde este centro del barrio de La Ardila. 

La decisión de suspender la fiesta de fin de curso, explican desde el colegio, se tomó en el momento con el único objetivo de garantizar la seguridad de todos los presentes: primero, evidentemente, de los niños pero también de los numerosos familiares que se habían congregado para disfrutar de las actuaciones de los peques, padres, madres, abuelos... 

Fue, admiten todavía consternados, tremendamente doloroso. Pero ni por asomo se quería que los alumnos -en definitiva, los auténticos protagonistas- se quedaran sin una fiesta que llevaban además varias semanas preparando con entusiasmo e ilusión. Así que se optó por trasladarla a la mañana de hoy.

A través de Whatsapp se informó anoche a todos los padres de los alumnos de que la fiesta se retomaría este viernes para que acudieran con sus disfraces y las vestimentas que habían preparado para las actuaciones. Y así se ha hecho, con el convencimiento además de que la mejor manera de superar lo ocurrido era disfrutar en paz de una jornada de convivencia entre todo el alumnado.