Carlos Valverde. Fotógrafo

De adolescente aficionado a una vida dedicada en cuerpo y alma a la fotografía

Apenas era un adolescente cuando Carlos Valverde recibió el mejor regalo que podrían hacerle, y que marcaría toda su vida: una cámara de fotos. "Era una cámara muy antigua, de esas de cajón, que fuera de la marca que fuera todo el mundo decía que tenía una kodak", escarba en su memoria en la que tiene grabada todos los detalles. Tal y como si fuera una imagen de esas que durante años captaba en La Isla.

 

"Las primeras fotos fueron en el muelle del Zaporito y en la salina de La Magdalena", apunta este hombre que la ciudad reconoce tras años de trabajo. Allí captó un momento muy de la tierra, "trabajaban sacando sal". No serían las únicas fotografías de las salinas de su trayectoria como fotógrafo. Su intención con todo ese material es hacer una montaje digital para que todo el mundo que lo desee pueda tener las imágenes de manera gratuita. 

 

Retirado ya, en su cabeza siguen rondando muchos otros proyectos, como los vídeos con las diapositivas en las que la calle Real se convierte en un escenario:  la Pascua Militar en la parte de Capitanía, las salidas de las cofradías de la Iglesia Mayor, la plaza del Rey con sus misas o coronaciones de vírgenes, hasta la Alameda con el mercado medieval, y de ahí en adelante con las cabalgatas de Reyes y de Carnaval. No se olvida del Recreo de Quirós y las palmeras que allí había. Son en definitiva, estampas de una parte de la historia de la ciudad reconocibles por muchos isleños y que año tras año Valverde tomaba con sus cámaras: desde las más antiguas, simples y complejas, a las más modernas, siempre bien formado e interesado en los conocimientos de esa herramienta de trabajo, que sigue siendo su pasión, aun cuando ya no trabaja y ha perdido la vista.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios