Temprano, a mediodía, ha despertado la jornada del Jueves Santo con un acto institucional que se ha convertido en una escena clásica de esta mañana: la entrega, por parte de la alcaldesa, del simbólico bastón al Regidor Perpetuo, un acto que ha llenado la Iglesia Mayor Parroquial en las vísperas de la salida más esperada, el punto álgido además de la celebración del 250 aniversario. Acompañó también a la hermandad en esta ocasión el delegado episcopal de hermandades y cofradías, Juan Enrique Sánchez. 

Las hermandades del día han recibido también una visita excepcional, la del ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, que ha recorrido los templos arropado por el PP isleño para conocer la Semana Santa isleña. También ha acompañado a la hermandad de las Tres Caídas, que ha sido la primera en ponerse en marcha desde la parroquia de la Sagrada Familia, en la barriada Bazán.

Esta hermandad ha regalado a La Isla sus primeras horas cofrades con sus característicos andares y con el vistoso romano a caballo que acompaña al Cristo. La hermandad se ha puesto en marcha a las dos y media de la tarde. En su camino hacia el centro ha pasado también por la Pastora, donde ha tenido un gesto con la hermandad de la Oración en el Huerto al dedicarle una levantá con motivo de su 75 aniversario. 

La segunda cofradía del día en ponerse en marcha ha sido la del Perdón, que ha impulsado la tarde del Jueves Santo desde el barrio de La Casería. Una de los aspectos más llamativos han sido los andares de la nueva cuadrilla que se ha encargado de portar el paso del crucificado, con José Antonio de la Cruz como capataz, que han llegado al centro doblando el paso y ofreciendo una insólita imagen en La Isla y que, de nuevo, devuelve el debate al tema de la carga. Cabe recordar que la hermandad, en este sentido, prescindió de la cuadrilla de los Jóvenes Cargadores Cofrades (JCC) el año pasado. 

A las seis y media se ha puesto en marcha también la hermandad de la Misericordia desde la Pastora, renovando una de las escenas más clásicas del Jueves Santo con la salida del paso de misterio a los sones de las cornetas y tambores. 

A la noche, a las nueve y media,  la cuarta hermandad de la jornada más larga de la Semana Santa isleña, la cofradía de la Expiración, se puso en marcha desde San Francisco.