Llega el verano, los colegios finalizan las clases y cierran sus puertas y los niños están de vacaciones. Entonces, surge un problema para muchos padres: encontrar dónde o con quién dejar a sus vástagos mientras ellos trabajan. "No todos tienen recursos o familiares que puedan hacerse cargo de los niños", reconocía la delegada de Educación, María del Carmen Lobato. De ahí, que el Ayuntamiento encabece la iniciativa para poner en marcha un campamento estival ya para el próximo curso al que pudieran asistir diariamente estos alumnos. Lo aprobó el martes el Consejo Escolar Municipal.

Por el momento, la ciudad cuenta con una escuela de verano que funciona gracias a la iniciativa de un centro educativo, el colegio Raimundo Rivero. A ella, sin embargo, explicaba la concejala popular, sólo pueden acogerse el alumnado de los centros adscritos al Plan Apertura activado por la Junta de Andalucía para apoyo a las familias. Se benefician, por tanto, sólo algunos centros públicos. "Los padres de los alumnos de otros colegios, incluidos los concertados, no tienen esta posibilidad", insistió Lobato.

Por eso, la delegada de Educación se mostró satisfecha por la unanimidad con la que el Consejo Escolar de San Fernando aprobó la propuesta de iniciar una experiencia similar a la ya existente tras el curso 2008-09: "Padres, profesores, todos han estado de acuerdo".

La intención es que las instalaciones de uno de los centros educativos del municipio, un colegio público concretamente, acojan el campamento durante el mes de julio. Por el momento, a un año todavía del inicio del proyecto, no se ha especificado qué colegio será. "Estamos trabajando desde hace un tiempo en ello, pero es muy pronto para dar un nombre", advirtió María del Carmen Lobato.

La edil no dejó pasar la oportunidad para recordar que la conciliación laboral y familiar, que permite esta medida, es competencia de la Junta de Andalucía y excede del ámbito educativo. "No de los centros o de los ayuntamientos, aunque lo vayamos a hacer", sentenció.