SOLIDARIDAD

Las redes se vuelcan para encontrar un vestido de novia para Juliana

  • Una iniciativa del grupo "Nos ayudamos Río San Pedro" busca un vestido de novia para una boda que se va a celebrar en breve

  • En pocas horas varias personas se han ofrecido a prestar su ayuda

Una mujer mira un escaparate con vestidos de novia

Una mujer mira un escaparate con vestidos de novia / DCA (Puerto Real)

Las redes sociales se convierten en muchas ocasiones en un medio perfecto para recabar solidaridad entre vecinos. Un ejemplo de ello es el grupo “Nos Ayudamos Río San Pedro”, en el que son habituales los llamamientos a la colaboración vecinal, desde donaciones de juguetes a la petición de ayuda a determinadas familias que han sufrido algún problema puntual. También se ofrecen materiales o artículos por parte de quienes ya no lo necesitan o se busca u ofrece trabajo. Una red de ayuda que conecta a los vecinos y que hace crecer la confianza en el ser humano, gracias a un grupo que nació para prestar ayuda durante el confinamiento.

El último llamamiento que se ha lanzado ha sorprendido, ya que lo que se buscaba era un vestido de novia. Rut, vecina del Río San Pedro (Puerto Real) que gestiona ese grupo, publicaba en la noche de ayer martes el siguiente mensaje: “Necesito vestido de novia de la talla 42 o 44. Es urgente. La boda será en breve y el vestido que tenía ha sufrido un percance y está inservible”.

De este modo se iniciaba una cadena para colaborar con Juliana, una mujer colombiana residente en Cádiz, que se encontró recientemente con una desagradable sorpresa. “Cuando se ha probado el vestido ha descubierto que está muy deteriorado y no se lo puede poner, por eso decidimos ver si alguien podía ayudarle”, comenta Rut, quien además de gestionar el grupo será la madrina de la boda.

El mensaje ya ha tenido respuesta. En pocas horas, varias personas han ofrecido su vestido para que Juliana lo pueda lucir el día de su boda y cumplir así su sueño. Vestidos que tendrán una segunda oportunidad tras, probablemente, meses o años guardados en una caja. La búsqueda, sin embargo, no ha finalizado, puesto que Juliana tendrá ahora que probarse los vestidos que lucirá en breve en que será uno de los días más importantes de su vida.

La ayuda que se presta a esta mujer es un ejemplo más de la utilidad que puede tener una red social como Facebook, a la hora de encontrar a alguien que te eche una mano. Probablemente, Juliana se podría casar con cualquier otro vestido, pero ¿por qué renunciar a un sueño mientras haya gente dispuesta a ayudarte a cumplirlo?

 

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios