El Ayuntamiento de Puerto Real y la Fundación Cajasol han patrocinado las primeras jornadas escolares en el Museo El Dique de Puerto Real donde han acudido alrededor de 500 alumnos de la ciudad. Durante la primera quincena de diciembre, todos los cursos de sexto de primaria, de colegios tanto públicos como concertados de la localidad han participado en esta actividad.

El Museo El Dique ofrece a los colegios una magnífica exposición permanente y un inmenso patrimonio etnográfico y documental de una realidad desconocida para muchos. Los alumnos han tenido la posibilidad de afianzar el conocimiento de nuestra historia más cercana.

Y es que los niños y jóvenes son agentes activos e imprescindibles en la conservación de esta memoria y en su proyección futura; para ello deben conocer esta actividad industrial. El Ayuntamiento de Puerto Real y la Fundación Cajasol han colaborado con el Museo El Dique para que puedan acceder a ella desde una visión lúdica, creativa e interactiva, al mismo tiempo que educativa e investigadora.

Los 140 años que ha cumplido el Dique de Matagorda no han pasado desapercibidos ni en la planta puertorrealeña de Navantia ni en la ciudad a la que la empresa naval ha querido hacer partícipe de tan importante efeméride.

María del Mar Díez, delegada de la Fundación Cajasol en Cádiz, que colabora con la iniciativa, explicó en la presentación de las jornadas escolares que la actividad nace con vocación de continuidad. “Este año serán medio millar de alumnos de Puerto Real los que se sumen al programa pero esperamos que en futuras ediciones se amplié a otros alumnos de la Bahía”. Díez detalló que el objetivo de la actividad es acercar a los centros escolares la cultura naval, tan arraigada en la Bahía, y que se afiance el conocimiento de nuestra historia más cercana porque “los astilleros han escrito gran parte de la historia de Cádiz”.

Por su parte, el director del Museo El Dique, José María Molina, dijo entonces que “para nosotros el hecho de recibir un número tan importante de alumnos nos va a servir de altavoz para que la comunidad escolar vaya tomando conciencia del patrimonio que tienen tan cerca”.